Cristiano continúa recortando la diferencia con Ali Deai

Cristiano nunca defrauda. El principal atractivo, por no decir el único, que tenía el Portugal-Luxemburgo era el de ver si el portugués marcaría en su lucha por alcanzar los 109 tantos internacionales del iraní Ali Daei, máximo goleador de la historia de las selecciones, y cómo no, Cristiano cumplió con las expectativas creadas y acudió a su cita con el gol.

Como el '7', Joao Félix también estuvo cerca de abrir el marcador en los primeros minutos, pero su volea con la izquierda se fue lamiendo el poste. El del Atlético fue titular en lugar de Güedes, fue de más a menos durante el encuentro, pero en la primera parte jugó sus mejores minutos con la selección desde que debutó en junio.

Quien sí acertó fue Bernardo Silva. El del City se ha convertido, tras Cristiano, en el hombre fuerte de la selección portuguesa por derecho propio. El atacante del City aprovechó un rechace de Moris en el área tras un buena jugada de Semedo para hacer el 1-0 a portería vacía.

El monólogo portugués continuó en la segunda parte, que empezó exactamente igual que la primera: con un remate de Cristiano, esta vez de chilena, y con el portugués reclamando otro penalti. Volvió a rozar el gol en el 58', pero de nuevo Moris despejó su disparo con la derecha a córner. Su insistencia se vio recompensada unos minutos más tardes, cuando le robó la cartera a Chanot, el último defensor, y superó al portero luxemburgués con una preciosa vaselina.

El árbitro le arrebató la oportunidad de ampliar su cuenta cuando decidió no señalar un penalti cometido al propio Cristiano que pareció más que claro. Pudo hacer dos goles más, pero sus remates se fueron por centímetros a la izquierda de la portería.

Guedes, ya casi sobre la bocina, hizo el tercero al cazar un balón muerto en el área tras un saque de esquina. Portugal y Cristiano hicieron sus deberes y el martes les espera Ucrania en un partido trascendental para la selección lusa en su camino a la Euro 2020.