Reportaje

Una bonita mañana soleada en el pantano de la Llosa del Cavall nacieron unos hermosos patitos. El ultimo huevo tardó un poco mas que los otros en abrirse. El Patito Feo nació el ultimo de todos y muy distinto de los demás era el mas grande de todos de color oscuro y con el pico un poco roto, sus ojos parecian tristes y con ojeras. Por este motivo le pusieron el nombre de Patito Feo.

Su mamá estaba avergonzada y le alejaba de sus hermanos. El Patito Feo se sentia muy desplazado y solo. Empezó a darse cuenta que no le querían y un dia decidió irse de la granja. Se fue por un camino hasta llegar a una granja. La mujer de esa granja encotrada posteriormente después de un largo trayecto  le dio bebida y comida però él era muy listo y se dio cuenta de que era mala y solo lo queria para engordarlo y después comerselo. El Patito Feo se fue tan rápido como pudo.

El invierno estaba a la vuelta de la esquina y con el hambre, el firo y el miedo a los cazadores intentó sobrevivir como pudo los meses mas frios. El buen tiempo empezó a llegar y los dias eran mas calidos i llenos de colores. Un buen dia mientras el Patito Feo estaba paseando al lado de un pequeño estanque  vio unos cisnes preciosos nadando con mucha tranquilidad. El Patito Feo tenia mucha envidia de ellos y le pregunto a uno si se podia bañar junto a ellos. Los cisnes le acceptaron a su grupo como si fuera uno mas de su familia. El Patito estaba muy triste porque era muy feo y torpe. A continuación, los cisnes le hicieron mirar a su reflejo y en ese momento vio su gran belleza, se unio a los demas y fue feliz para siempre en ese hermoso y pequeño estanque.