La historia detrás del artículo de Jack Alexander sobre A.A.
Foto sin fecha de Jack Alexander
El 1 de marzo de 1941,
historia de Alcohólicos Anónimos.
The Saturday Evening Post
Anónimos: los esclavos de la bebida liberados ahora liberan a otros”, escrito por Jack
publicó un artículo titulado “Alcohólicos
Alexander.
El artículo fue un acontecimiento
decisivo en la
La historia detrás del artículo comienza cuando el dueño
The Saturday Evening Post,
de
la existencia de A.A. por mediación de dos amigos suyos.
Judge Curtis Bok, se enteró de
Post
Tuvo interés en que el
contara la historia de la
organización y llamó a un bien conocido periodista de
The
Saturday Evening Post
, Jack Alexander, para hacerlo.
Bill W., cofundador de Alcohólicos Anónimos, deseoso de
dar a conocer el mensaje de A.A., se reunió con Alexander.
Dio a Alexander acceso a los documentos de A.A., le ofreció
un recorrido por los lugares de interés de A.A. y concertó
entrevistas con los custodios no alcohólicos de la Junta de
Servicios Generales y con los custodios miembros de A.A.
La correspondencia que mantuvieron Jack Alexander y Bill W. a principios de 1941 da muestra
del entusiasmo que se sentía ante la expectativa de la publicación del artículo. El 4 de enero de
1941, Alexander escribió a Bill W. y le envió el manuscrito del artículo para que Bill lo leyera. El
6 de enero, Bill le contestó y en su respuesta se puede apreciar ese entusiasmo por la
publicación del artículo. Bill escribió:
Me gustaría poder expresarte adecuadamente el sentimiento de gratitud que cada uno
de nosotros siente por ti y por el Saturday Post por lo que está a punto de ocurrir. No
te puedes imaginar el alivio directo de tanto sufrimiento que llegará a su fin gracias a
tu pluma y tus buenos editores.
Por muchos días los A.A.
Portada de The Saturday Evening Post, 1 de marzo, 1941
brindaremos por ti - ¡con coca
cola, claro!
Después de la publicación del
artículo el 1 de marzo de 1941,
empezaron a afuir las
solicitudes de información,
manteniendo muy ocupado al
exiguo personal de la “Sede de
A.A.”, la precursora de la
Ofcina de Servicios
Generales. El 12 de marzo de
Nueva York. Le dijo que la ofcina había recibido una avalancha de solicitudes de información,
1941, Ruth Hock, primera
secretaria no alcohólica de
A.A., escribió al Dr. Bob, cofundador de A.A., para ponerle al día de lo que estaba ocurriendo en
918 en 12 días como consecuencia directa del artículo.
The Saturday Evening Post
Las ofcinas de
información.
Un boletín del
Post
también recibieron una gran cantidad de solicitudes de
del 26 de marzo de 1941 refeja la fuerza del artículo.
“Alcohólicos Anónimos – los esclavos de la bebida liberados ahora liberan a otros”, 1 de marzo de 1941
Después de la publicación del artículo de Jack Alexander sobre Alcohólicos Anónimos, la oficina del Post
recibió una cantidad excepcionalmente grande de correo de sus lectores, en su mayor parte preguntando
cómo se podía establecer contacto con los grupos que están haciendo este trabajo en diversas ciudades.
Hubo varias llamadas a nuestras sucursales para solicitar información sobre organizaciones locales de
este poco común grupo.
Ocho años después de la publicación del muy exitoso artículo del
Saturday Evening Post
de 1941,
Bill W. escribió a Jack Alexander para hacerle una petición. Bill W. estaba interesado en un
artículo de seguimiento y tenía la esperanza de que Alexander lo escribiera, y el 8 de junio de
1949, Bill W. escribió lo siguiente:
Si pudieras dedicarme un poco de tu tiempo, me gustaría ir a Philadelphia para verte.
Hace ocho años el Saturday Evening Post sacó a AA de su etapa pionera y lo
convirtió en un movimiento. Innumerables miles de personas deben su buena suerte,
de hecho sus vidas, a lo que el Post hizo por ellas. Seguimos enviando por correo
grandes cantidades de reimpresiones de tu artículo.
Hoy día AA rara vez pide publicidad. Supongo que la seguimos recibiendo en grandes
cantidades debido en parte a esa razón. Pero ha llegado el momento en que se debe
hacer una excepción.
El motivo de esta carta es que definitivamente me gustaría pedirles un favor. Podrían
publicar otro artículo acerca de nosotros.
El público en general solo tiene una vaga idea de cómo es nuestra sociedad. Creo que
estarían interesados en verla por dentro.
Desde nuestra perspectiva, se tiene que hacer un trabajo vital. Ahora que la fórmula
de la recuperación está al descubierto y dando resultados a un ritmo prodigioso,
nuestro problema principal es mantener nuestra unidad como movimiento hasta que
todos los borrachos del mundo hayan podido considerar detenidamente la idea.
Entonces, si el hombre de la calle puede ver cómo es por dentro realmente nuestra
comunidad, y pudiera resultar bien claro para él lo bueno que los A.A. hacen y lo que
no hacen en sus relaciones unos con otros y con el mundo exterior, el Saturday
Evening Post habría sacado una póliza de seguros a favor de nuestro futuro, cuyo
valor nadie podría calcular.
El 9 de junio, Jack Alexander contestó diciendo que siempre había pensado en escribir un
artículo de seguimiento pero nunca se había puesto a hacerlo. También le parece que hay algún
problema con la idea y dice:
Hay un problema básico respecto al asunto; no veo, en este momento, que haya suficiente
material para justificar echarle otro vistazo. Es cierto que el número de miembros de A.A. ha
crecido enormemente, pero eso en sí mismo no es sino un dato estadístico. La historia básica
––la psicología de los bebedores, cómo A.A. funciona para ellos, los pasos para detener el
hábito–– sigue sin cambiar; o al menos así me parece a mí.
El 13 de diciembre de 1949, Bill W. escribió a Jack Alexander describiendo los momentos
decisivos del movimiento de A.A. entre los que se incluían la decisión de abandonar el Grupo
Oxford, el hecho de que Rockefeller insistiera en que no necesitaban dinero, la formación del la
Fundación Alcohólica y la composición de los dos primeros capítulos del Libro Grande.
En los meses siguientes Bill
Portada de The Saturday Evening Post, 1 de abril de 1950
W. y Jack Alexander
mantuvieron
correspondencia acerca de
las correcciones que creían
necesarias en el artículo.
Finalmente, ocho meses
después de que Bill W.
presentara a Jack Alexander
su idea, el artículo “El mejor
amigo del borracho” fue
publicado en el número del
The
1 de abril de 1950 de
Saturday Evening Post.
El mejor amigo del borracho” tuvo un gran éxito, tal como lo había tenido el anterior artículo. El
22 de abril de 1950, Bill W. escribió a Ben Bibbs, editor de
The Saturday Evening Post,
para elogiar
a Jack Alexander y los dos artículos.
Bill escribió lo siguiente:
Jack Alexander, en su reciente artículo del Saturday Evening Post, “El mejor amigo del
borracho”, lo ha vuelto a conseguir.
Nosotros, los Alcohólicos Anónimos, queremos expresar lo inmensamente agradecidos
que cada uno de nosotros se siente por este feliz acontecimiento. No es una exageración
decir que el artículo sobre “Alcohólicos Anónimos” de Jack de hace nueve años puso
la recuperación al alcance de 10,000 alcohólicos y llevó una gran felicidad a otros
tantos hogares. Ya que la impresión causada al público por este último artículo de Jack
no ha podido ser mejor, no tenemos ninguna duda de que conseguirá un buen resultado.
Sabemos que todo el mundo llegará un día a estar de acuerdo en que estos dos
artículos de Jack acerca de A.A. deben ser considerados como el mejor servicio público
que el Saturday Evening Post haya hecho jamás. Y eso es decir muchísimo.
Cuando Jack Alexander falleció en 1975, el obituario del periódico
West Texas Register
le atribuyó
el mérito de ser el periodista que convirtió a “Alcohólicos Anónimos en una importante
organización por medio de los artículos que escribió acerca de su trabajo”. Hoy día, los Archivos
Históricos de la Ofcina de Servicios Generales aún siguen recibiendo peticiones de copias de
los dos artículos.
Nota: [A.A. World Services publica el artículo de 1941 en formato de folleto y vende
aproximadamente 22,000 ejemplares al año.]
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