“Buenos docentes o docentes competentes en la educación colombiana”
La educación básica en Canadá, Corea, Finlandia y Singapur se han mantenido en los primeros lugares desde que existen pruebas de evaluación por competencias a nivel mundial. En estos países son muy altos los niveles de exigencia en la selección de los docentes, criterios claros y variados en la evaluación de estos y diversos programas de formación inicial y permanente para sus maestros. También es de resaltar que tienden a ser sistemas con alto reconocimiento social de los docentes y con políticas salariales que estimulan a los mejores a vincularse y a permanecer en la docencia.
La situación colombiana es opuesta a la de los países con mejores resultados en el mundo. Tenemos docentes con muy bajos niveles de formación y preparación previa, mal remunerados y que solo han participado parcialmente en procesos de evaluación.Los maestros no se forman en aquello que necesita el país, sino en lo que las universidades deseen y ofrezcan.
Propongo diversas estrategias para atraer y retener maestros de excelente calidad. Para lograrlo, recomiendo que el estado mejore los salarios de ingreso, becas para los estudiantes con más altos puntajes en las pruebas Saber para acercarlos hacia la docencia y garantizar que la evaluación de los maestros tenga un carácter formativo que permita lograr un mejoramiento continuo de la enseñanza.
También recomiendo incentivos para que los mejores docentes permanezcan ejerciendo su labor, sistemas tutoriales de acompañamiento a los docentes que por primera vez se vinculan al aula de clase y exigencias de cursos adicionales en universidades acreditadas para aquellos profesionales que quieran asumir la carrera del magisterio.
Nadie puede negar que es imposible elevar la calidad de las competencias docentes sin mejorar los criterios de selección y evaluación de los docentes.
Es una excelente propuesta que hay que apoyar e impulsar, pero hay que tener bastante claro que de implementarse su impacto en la calidad será menor al previsto si no se trabaja simultáneamente para garantizar que tengamos una educación más pertinente para las necesidades de la época, los contextos y los jóvenes actuales. No basta tener buenos docentes, si lo que tienen que enseñar es impertinente, descontextualizado o demasiado particular, como desafortunadamente sigue ocurriendo en la mayoría de instituciones educativas del país.
Para mejorar la calidad de la educación en Colombia necesitamos mejorar la selección y la evaluación de los docentes. Pero ello por sí solo no basta. También necesitamos garantizar unos currículos más pertinentes en la formación de los futuros docentes, necesitamos que las normales y las facultades de educación garanticen el verdadero desarrollo de competencias docentes, algo que todavía no estamos logrando.
Necesitamos que todos trabajemos en la misma dirección. Necesitamos privilegiar, por encima de todo, el trabajo en competencias transversales, las cuales deberían convertirse en el fin más importante de la educación básica.
La transformación educativa no da espera y tendremos que impulsarla entre todos los docentes en formación y los docentes que se encuentran trabajando, pero también necesitaremos a los pedagogos, a los investigadores, a los empresarios, a las facultades de educación, a los padres de familia, a los estudiantes y a los medios de comunicación. Mejorar la calidad de la educación no puede depender exclusivamente de la clase política, ya que para ella es más rentable invertir en pavimento que en calidad de la educación. Invertir en las competencias docentes es un buen camino a la calidad de la enseñanza.
LA COMUNICACIÓN Y EL PROCESO ENSEÑANZA APRENDIZAJE
Este proceso ha sido transformado al pasar de los años, ya que por muchas razones el mundo debe avanzar y con ello la educación de las nuevas generaciones. Muchos se preguntan el por qué, ya no existe el interés en mantener los ideales, no solo mantenerlos, sino que estos perduren; como es el caso de muchos maestros que sostuvieron sus ideales y crearon un mundo educativo diferente, entre ellos está María Montessori, creyó en aquellos niños llamados “difíciles”, luego entró en el mundo de ellos y los conquistó para que se expresaran y dieran a conocer a todo el mundo que si se pueden sostener los ideales y creer en lo que ante los ojos de los demás no vale; al igual Gabriela Mistral, desarrollo en sus estudiantes formas de expresarse por los medios de comunicación, y como resultado uno de sus alumnos fue Pablo Neruda, ¿vale la pena crear ambientes de comunicación en el aula? Por supuesto que ¡sí!.
En este artículo, se podría mostrar, muchos maestros que con su comunicación efectiva cambiaron y transformaron vidas, ahora a la nueva generación de maestros y maestras les queda la valiosa tarea de crear, formar, edificar, no solo estudiantes o alumnos sino agentes que promuevan el cambio en el mundo, con ideales transformadores.
Como se puede apreciar, el trabajo eficaz por competencias en el aula, requiere primeramente de la comprensión de las mismas por parte del docente, quien se convierte en el primer filtro determinante para asegurar su aplicación satisfactoria; por lo que es primordial un ejercicio constante de reflexión en torno a su función frente al nuevo ambiente de enseñanza y aprendizaje, y de ser necesario, estar 72 dispuesto a repensar y replantear sus actividades profesionales de modo que al vencer la rutina, se pueda adaptar más fácilmente no a su contexto personal, sino al contexto particular y actualizado de los estudiantes.
Esta web se reserva el derecho de suprimir, por cualquier razón y sin previo aviso, cualquier contenido generado en los espacios de participación en caso de que los mensajes incluyan insultos, mensajes racistas, sexistas... Tampoco se permitirán los ataques personales ni los comentarios que insistan en boicotear la labor informativa de la web, ni todos aquellos mensajes no relacionados con la noticia que se esté comentando. De no respetarse estas mínimas normas de participación este medio se verá obligado a prescindir de este foro, lamentándolo sinceramente por todos cuantos intervienen y hacen en todo momento un uso absolutamente cívico y respetuoso de la libertad de expresión.
No hay opiniones. Sé el primero en escribir.