Animadores musicales

Es tiempo de siembra y convocatoria.   Si sabés música y te gustaría cantar y/o interpretar algún instrumento para gloria de Dios, acercate a nuestra Secretaría Parroquial y dejanos tus datos de contacto.   

Los animadores musicales participan brindando sus dones en servicio durante la Santa Misa, en momentos especiales como días de Celebración Penitencial Cuaresmal, Celebración del Sacramento de la Reconciliación, retiros espirituales, grupos parroquiales, conciertos, festivales, cantatas con otras parroquias y en eventuales celebraciones de otras parroquias cuando las mismas invitan.

El animador musical pasa por un proceso formativo que dura el tiempo que cada persona necesite.  La formación comprende un camino teológico-doctrinal necesario, ofrecido en conversaciones, catequesis y charlas, y uno práctico que se desarrolla durante las celebraciones.    La experiencia que cada uno trae cuenta y aporta riqueza al grupo, aunque todos nos ajustamos a la misión cristiana y a los documentos y la tradición de la Iglesia Católica.

Las personas dedicadas a la animación musical deben estar en formación continua mediante la lectura de material enviado por whatsapp, la asistencia a retiros y la participación en reuniones parroquiales.   Todo se ofrece para que puedas acogerte al ritmo parroquial, poco a poco, eligiendo en qué momento o situación participar, según tus posibiliades.   

Los menores de edad, para ser animadores musicales, deben formar parte de la Acción Católica de la parroquia o del Catecismo Parroquial.  Si tu hijo/a está entusiasmado en participar, deberás traerlo los sábados desde las 16hs, a partir de marzo.  Si sos mayor de edad, te invitamos a pasar por la Secretaría Parroquial los martes de 17:30 a 19:30, jueves de 10 a 12 hs o viernes de 10 a 12 hs o de 17:30 a 19:30 hs, también podés venir media hora antes de la misa de sábado, a las 18 hs.

Animador musical es un catequista que transmite el Evangelio mediante canciones y actitudes de acogida, ayuda en el servicio general de la misa, orienta a los que necesitan guía dentro del rito y tiene actitud de escucha cuando alguna persona de que va al templo necesita un momento de intercambio espiritual que lo ayude en su cotidianeidad.   Es por eso que es muy importante que sepa transmitir alegría y esperanza, templanza de espíritu y vocación de servicio.   

El animador musical no dirige la misa sino que es parte de la Asamblea o Pueblo de Dios en la que todos participan por igual y por ese motivo no necesita saber tocar un instrumento sino que debe saber animar a cantar los diferentes momentos, con o sin micrófono.    Es que no se va a la Santa Misa a lucirse sino a dar gloria a Dios mediante la canción.