La extraordinaria jugada del Estado está cambiando a Chile.

9 de diciembre de 1899.

El Estado magnifica el territorio chileno, tanto en el norte, ganando las tierras salitreras de Bolivia y en el sur colonizando tierras deshabitadas con la ayuda de los alemanes.

El Estado chileno ha decidido ampliar el país tanto por el norte como por el sur para que nuestro Estado nación sea más grande y crezca. En el censo oficial de 1835 llamado “I censo de la población de Chile” se registraron 1.103.036 habitantes, después se realiza el “sexto censo de población” en 1885 y sus resultados indican que la población de Chile es de 2.507.005 habitantes, la población en Chile llega a aumentar en 1.403.969 de habitantes a lo largo de todo el país. En el norte ganamos la guerra del pacífico, la cual inició en 1879 con el “combate naval de Iquique” y finalizó en 1884 con el tratado de paz de Chile y Bolivia. Obtuvimos tierras desde Antofagasta hasta Arica, en donde establecimos distintas salitreras, con esta expansión territorial comienzan a habitar más personas en Chile mezclando culturas y danzas, tanto chilenas como bolivianas o peruanas. La fiesta de la tirana es la más popular, la cual, se celebra en el pueblo de la tirana en la región de Tarapacá, también posee una coreografía muy similar a las danzas bolivianas; esto nos muestra la mezcla entre culturas y la fuerte fe en la virgen del Carmen.

Y por el otro lado en el las zonas sur y austral de nuestro país, colonizaron principalmente tierras como Llanquihue, Valdivia y Osorno con la gran ayuda de los colonos alemanes, quienes fueron invitados por Bernardo Philippi y luego por Vicente Pérez Rosales, los cuales, terminan trayendo no solo sus conocimientos agrícolas y la arquitectura, también culturales, como la cerveza que terminó generando grandes ganancias al Estado por las industrias cerveceras del sur, el exquisito kuchen originario de Alemania que todos anhelan probar y el uso del cuero de los animales para hacer vestimentas muy parecidas a la de los alemanes y alfombras para los hogares de los habitantes.

El norte y el sur de Chile tuvieron grandes cambios culturales, sociales y territoriales gracias al Estado quien peleó para que nuestro país creciera en todo ámbito: territorial, cultural, y social generando un Chile más grande y mejor.