FUTURE ALUCINA CON BARCELONA

Era jueves 30 de mayo y la noche se presentaba fresca, con atisbos de noche veraniega. La gente en el Fórum se movía por interés según sus gustos musicales. Y es que, como cada año, en el Primavera Sound los artistas se solapan en la cartelera dejando poco margen a la improvisación. Si quieres ver a tus cantantes favoritos te tienes que organizar, planificar y sacrificar la oportunidad de ver a uno que te gusta para poder ver al que te encanta. Y es así. No siempre uno puede tener lo que desee.

Es por eso que alrededor de las 00:00 la multitud ya se agrupaba en la esplanada principal delante del escenario Seat para ir cogiendo sitio para ver Future. El cantante de Atlanta tenia su actuación a las 00:30, pero como todo lo bueno se hace esperar, o por mal costumbre de los artistas, el rapero no salió hasta un rato pasadas la 01:00. Eso sí, la multitud enloqueció.

Se trataba de la primera vez en su trayectoria musical que pisaba un escenario español. Y no por qué no tenga audiencia en el país, que la tiene, sobre todo entre la gente joven y los extranjeros que aquí residen, sino porqué rara vez los artistas del género ‘trap’ se atreven a dejar los EE. UU para viajar al extranjero. Y mucho menos a un país de habla no inglesa. Bien, si anteriormente comentábamos que el público enloqueció con Future, el también lo hizo con el público. Por su expresión de estupefacción se notaba de lejos que ni él, ni nadie de su equipo, se esperaban una respuesta ante su presencia como la que se les presentó en Barcelona. Subió al escenario solo, con el rostro cubierto por unas gafas de sol (no suele quitárselas nunca), una chaqueta de beisbol y un sinfín de cadenas brillantes al cuello.

La gente cantaba o mejor dicho gritaba sus canciones al tiempo que el saltaba por el escenario. A eso de la mitad del show se unieron a el un grupo de bailarines que despertaron mucha admiración entre la gente e hicieron así del concierto un espectáculo más visual. Cabe decir que la enorme pantalla situada detrás de todo desde que empezó el concierto, proyectaba un conjunto de audiovisuales que se integraban a la perfección a la atmosfera festiva del momento.

Future terminó por quitarse la chaqueta, empapada en sudor, y agradeciendo en castellano, como pudo, la respuesta del público hacia su concierto.