Resultados de una investigación realizada en la Provincia de Mendoza, República de Argentina.
Como conclusión de este periodo, en que se produce la primera y más extensa supresión de las diversidades alejadas del modelo de Estado hegemónico, se concreta
el desplazamiento de la frontera con el indio y el avance en los procesos de delimitación internacional, hechos ocurridos entre las décadas de 1850 y 1880, que implicaron la incorporación de extensas áreas que llevaron a duplicar la extensión que tenía el país hasta entonces (Benedetti y Salizzi, 2014, p. 126)
La frontera como concepto
La frontera como concepto resulta difícil de definirse ya que en sí misma requiere de establecer límites. Esta idea que presenta Balibar (2005, p.80) en su texto ¿Qué es una frontera?, permite evidenciar lo arduo de explicitar una definición unívoca de este concepto. Profundizando este aspecto, el autor presenta los siguientes atributos de la frontera, igualmente problemáticos:
• Sobredeterminación: refiere a que cada frontera tiene su propia historia, basada en conflictos particulares y configuraciones de poder de los cuales resulta un específico establecimiento de límites.
• Polisemia: es decir que las fronteras nunca existen de la misma manera para individuos pertenecientes a grupos sociales distintos, ya sean migratorios, de clases sociales, género, religión, etnia, etc.
• Heterogeneidad: existen diversas funciones de demarcación que las fronteras cumplen simultáneamente habilitando o negando, por ejemplo, distintos derechos.
Por otra parte, los procesos de globalización han hecho que las fronteras sean hoy más difusas. En ese sentido, el paradigma clásico de frontera donde coinciden territorio y población se complejiza. (Zapata- Barrero, 2012, p.31).
La representación social como concepto
Para una comprensión más precisa del concepto de representación social debemos remitirnos a las teorías sociológicas que comienzan a desarrollarse hacia fines siglo XIX y comienzos del siglo XX, en las cuales adquieren importancia los significados sociales.
caos y la contingencia que la realidad nos presenta cotidianamente, por ello son tanto conocimiento del sentido común como saberes más elaborados. La principal diferencia de estas definiciones con la teoría de las representaciones colectivas de Durkheim es que, al sustituirse el calificativo colectivo por el de social, se remite a la idea de conexiones y relaciones entre los sujetos. En ese sentido, puede haber en una sociedad múltiples representaciones concebidas como producciones de grupo que además pueden tener un tiempo histórico de duración, posibilitándose en mayor grado la existencia de cambios en las mismas. Así, Moscovici (1988) vincula también el concepto de representación social con el de ideología, al decir que son arquetipos de razonamiento común o preconcepciones, que se originan en procesos históricos y creencias sociales.
Método
Las entrevistas analizadas en el presente artículo han sido efectuadas en el marco de un proyecto de investigación- citado anteriormente- de mayor envergadura. Su objetivo fue indagar el desempeño institucional de la escuela y la justicia ante la cuestión intercultural y las estrategias relacionales entre los diferentes actores que las integran, focalizando los discursos y las prácticas respecto a la población nativa y a la población migrante, llegada a partir de la segunda mitad del siglo XX al Área Metropolitana de Buenos Aires y la Provincia de Mendoza.
En este artículo analizaremos los resultados de las entrevistas que se realizaron en el universo del sistema judicial en la provincia de Mendoza. Para el trabajo de campo se diseñó una guía de pautas con preguntas abiertas que fue utilizada en todas las entrevistas de modo que la información obtenida fuese comparable. La técnica implementada para la selección de los entrevistados fue la denominada “bola de nieve” (Valles, 1999, p. 202). Se respetó el anonimato y confidencialidad de los entrevistados, citándose solo el cargo desempeñado en la institución y la cantidad de años en el sistema judicial.
En conclusión, a pesar del desarrollo de la internacionalización de los derechos y el avance a nivel normativo al respecto, los estados nacionales continúan actuando como los garantes de los derechos de sus sujetos nacionales. Por ello, los nativos- en este caso miembros del poder judicial- manifiestan que es el Estado el que debe regular quiénes tienen acceso a dichos bienes y servicios que son evidenciados como recursos escasos. La dicotomía se plantea entre “los que están adentro” y “los que están afuera”. Éstos últimos, como se explicita en la siguiente cita de entrevista, son considerados como “demasiados”, implicando un exceso en la demanda de derechos como los de la salud y educación.
Dimensión 2. Representaciones sobre política migratoria: frontera geopolítica
No, eso me parece que es una cuestión de que si el Estado ya permite el ingreso de inmigrantes, me parece que debe permitir de manera irrestricta el acceso a la salud y el acceso a la educación. Porque si no, encima que vienen a trabajar, no consiguen trabajo, van a estar enfermos y van a sumarle al Estado. O sea, lo asocio con una cuestión de derechos humanos a eso. O sea que, la política restrictiva no tiene que ser una vez que el inmigrante está adentro sino ver si lo dejamos entrar o no lo dejamos entrar, porque no podés tener una política abierta para la inmigración y cuando está acá darle la espalda”. (Auxiliar, cinco años en el sistema judicial.)
El Estado argentino tiene primero que implementar políticas para la pobreza interna, pero bueno, no está mal por ahí ... ¿Qué quiere ese Estado? ¿Qué mano de obra quiere atraer? Si quiere atraer mano de obra, por lo general tenemos mano de obra [extranjera] muchas empleadas domésticas. Entonces por ahí... sí, está bueno que diera beneficios para esta gente que es una mano de obra útil acá en Argentina. (Auxiliar, 8 años en el sistema judicial.)
Dimensión 3. Representaciones sobre las migraciones de “ayer” y de “hoy”: frontera simbólica.
Hoy este país es un poco lo que dejaron los inmigrantes, lo que hicieron los hijos de los inmigrantes [Secretario, 27 años en el sistema judicial];
...países como el nuestro que se han hecho al calor de la migración. Ya desde la constitución “para todos los hombres que quieran
Trans-pasando Fronteras, Núm.15, 2020. Cali-Colombia ISSN 2248-7212 • ISSN-e 2322-9152
La frontera como representación social: migraciones y sistema judicial de Mendoza
poblar el suelo Argentino...” desde lo normativo hasta la cuestión histórico cultural argentina, es un país hecho al calor de Italia y España. (Secretario, seis años en el sistema judicial)
Empero, estas percepciones actuales no deben hacernos olvidar que aquellas oleadas de migrantes también fueron visibilizadas, en los momentos de su ocurrencia, de modo negativo. Cabe recordar las leyes que mencionamos en la introducción y que criminalizaban a los migrantes por sus ideologías de índole anarquistas y/o socialistas. Del mismo modo, en las instituciones educativas se procuraba homogeneizar a las comunidades migrantes recién llegadas, las mismas debían asimilarse a las pautas culturales de la sociedad que las recibía y de un Estado Nacional en plena construcción que exigía la lealtad a una bandera, un himno nacional, una lengua entre otros patrones de la naciente nación argentina.
Hecha esta aclaración, analicemos cuáles son las representaciones que construyen hoy los entrevistados/as sobre las migraciones de ultramar. Entre los elementos representacionales podemos señalar los siguientes:
- La identificación de los miembros del sistema judicial con aquellas migraciones en términos de ascendencia, se trata de sus abuelos o bisabuelos procedentes de diversas latitudes de Europa.
- La idealización de su rol como hacedoras de los pilares de la comunidad nacional actual con escasa conciencia de los conflictos que subyacieron en los momentos de su arribo.
- La consideración de migrantes trasoceánicos como portadores de valores ligados al trabajo, el esfuerzo y la civilidad y una moralidad positiva que sentaron las bases de la nación.
- la idea del migrante europeo como el que se arraigaba, se quedaba, proyectaba un futuro en el territorio nacional en construcción.
Conclusiones y reflexiones finales
sentidos sobre los migrantes en Argentina, particularmente en la provincia de Mendoza. Dichas representaciones circulan al interior de la institución judicial y también en la comunidad en general, son re-producidas en el intercambio social, en las prácticas cotidianas y la comunicación entre los individuos. En el análisis de este conocimiento del sentido común, nos encontramos no solo con la lógica y la coherencia, con el consenso y el acuerdo sino también con la contradicción y la heterogeneidad. En este sentido, se trató de describir algunas de las percepciones que, muchas veces naturalizadas bajo el lenguaje neutro del sistema judicial (léase igualdad formal), encubren relaciones de dominación y perpetuación de desigualdades, con el afán de contribuir al debate sobre los derechos de los migrantes en un mundo en que las fronteras parecieran multiplicarse.
La construcción de la frontera en Argentina se remonta a mediados del siglo XIX. En aquella instancia histórica, con la caída de Rosas, el modelo agroexportador (basado en la producción de granos, carnes y lana, fundamentalmente para abastecer a las sociedades e industrias europeas) profundizaba su consolidación. Como medidas gubernamentales orientales cabe resaltar la eliminación de las comunas originales de la región, por la excavación de fosos denominada “Zanjas de Alsina” para evitar los ataques de los “malones” (Halperín Dongui ;1997); la conquista del desierto fue una serie de campañas militares , con el objetivo de de desplazar la frontera hacia el rio negro y que supuso el aniquilamiento físico, cultural y económico de las comunidades que habitaban la Patagonia del actual territorio nacional (Halperín Dongui, 1997). Asimismo, a nivel internacional, un hecho histórico a destacar en esta etapa es la “Guerra de la Triple Alianza” (1864-1870). Este conflicto bélico entre Paraguay, por un lado, y Argentina, Uruguay y el Imperio de Brasil, por el otro, no resultó en un aumento del territorio para Argentina y tuvo consecuencias devastadoras en términos de pérdidas de vidas humanas y materiales para el territorio guaraní. (Pomer, 1987). Simultáneamente, las clases dirigentes comenzarían a establecer cuáles serían otros de los requisitos necesarios para el desarrollo de la “nación”. Así, la migración transoceánica tendría un rol sumamente relevante: importar la “civilización” al territorio. Los migrantes aportarían dos elementos centrales: la fuerza de trabajo necesaria para el modelo productivo antes descripto y la “cultura” para la constitución de la nación Argentina. De modo tal que, al tiempo que se constituía la frontera geopolítica también se irían estableciendo fronteras simbólicas entre quiénes serían parte de esta “nueva nación” y quiénes consecuentemente no. Si bien se diferenciaban en algunos puntos entre sí, ambos representantes de la “Generación del 37”, consideraban necesaria la creación de una nación en la que la civilización, el progreso y el desarrollo se vinculaban con los aportes desde Europa (Terán, 2008). En este proyecto no habría lugar para determinados sectores, estableciéndose así fronteras culturales y físicas. Todo ello, claro está, al servicio de un modelo político y de producción determinado. El despegue de la vitivinicultura mendocina se produjo en parte con la llegada del ferrocarril en 1885 y el crecimiento demográfico que acompañaron este proceso. Así, la mano de obra que trajera la migración europea funcionaría como un factor esencial en el crecimiento de la industria del vino. (García Vázquez, 2005, p. 68).
La frontera como concepto resulta difícil de definirse ya que en sí misma requiere de establecer límites. Sobredeterminación: refiere a que cada frontera tiene su propia historia, basada en conflictos particulares y configuraciones de poder de los cuales resulta un específico establecimiento de límites. (Balibar 2005, p.80). Para una comprensión más precisa del concepto de representación social debemos remitirnos a las teorías sociológicas que comienzan a desarrollarse hacia fines siglo XIX y comienzos del siglo XX, en las cuales adquieren importancia los significados sociales. Durkheim (2000; 2008) y posteriormente Schutz (1964) son dos representantes de esta corriente. El primero de ellos es, sin duda, quien aporta el antecedente inmediato de la categoría de representación social que desarrollará la Psicología Social. Las instituciones sociales son fuente y receptáculo de representaciones sociales, en ellas se anclan y objetivan modos sistemáticos de clasificaciones de sucesos, personas y grupos. La institucionalización de representaciones se produce a través de diversos dispositivos con mayor o menor grado de ritualización: normativas, procedimientos, protocolos, saberes más o menos burocratizados, prácticas rutinarias de “cómo se hacen las cosas”, formularios, etc. Entendemos al sistema judicial, en tanto universo de estudio, como un campo que, siguiendo a Bourdieu (2000)
La representación social ha sido un aspecto controvertido dentro de este campo de estudios. Primero habría que empezar preguntándose: ¿qué se entiende por representación comúnmente? En el teatro, para circunscribirse a un ejemplo particular, representar implica una sustitución aparente, poner algo en el lugar de otra cosa. Esta metáfora no es casual: una representación puede referirse lo mismo a objetos ideales que a reales, tanto ausentes como presentes.
En el acto de representación siempre se relaciona un sujeto (grupal e individual) con un objeto determinado. Representar es, en el sentido estricto de la palabra, volver a presentar, o sea, re-producir, que no reproducir, un objeto cualquiera mediante un mecanismo alegórico. Esta reproducción siempre es subjetiva en última instancia. “En la representación tenemos el contenido mental concreto de un acto de pensamiento que restituye simbólicamente algo ausente, que aproxima algo lejano. Particularidad importante que garantiza a la representación su aptitud para fusionar percepto y concepto y su carácter de imagen.
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