La dictadura que nos aqueja

No es un secreto el momento crítico y difícil que vive nuestro país en la actualidad, cada vez está más normalizada la muerte en las calles y cada vez más el orden social se pierde más, no es para nada raro, lamentablemente, ver personas muriendo de hambre en la calle por la situación del país, mientras que otros se llenan los bolsillos.  Se llegó a un momento en el cual el mismo gobierno decide la reelección de un presidente el cual en su gobierno no ha hecho más que propagar más violencia y empeorar la situación del país, sucesos como la masacre a universitarios efectuada por el Batallón colombiano hace 3 años o la pacificación a un sin número de poblaciones rurales en Colombia, nos permiten presenciar la forma de actuar de este gobierno.

Nuestro país está en un punto de quiebre, la corrupción es inminente y muy fuerte, al punto en el que multiples diarios y periódicos del país fueron cerrados con la excusa de que "llenan la país de odio y mezquindades políticas, que se traducen en violencia en zonas rurales", cuando son la alternativa para las personas para enterarse de lo que ocurre en el territorio colombiano y para concientizarse acerca de lo nocivo que es el gobierno.

Una cosa está clara, esta dictadura dirigida por el presidente Gustavo Rojas Pinilla no quiere a un pueblo informado, quiere a un pueblo inculto y necio, quizá para seguir fusilando a universitarios al rededor del país sin ser mayormente criticado, y a la vez jactarse por la construcción de un aereopuerto nuevo, o para seguir ganando dinero de forma descomunal, como decía la locución latina, pan y circo para el pueblo, solo que no hay pan, hay violencia.

Generar conciencia acerca de la dictadura en la que vivimos es necesario, como colombianos debemos actuar para mejorar la situación de nuestro país, quejarnos incluso más fuerte para poder cambiar algo, para cambiar toda la corrupción que nos aflige y la violencia que nos debilita como sociedad.