Un poco de todo...

Desde que tengo uso de razón, Campoverde a llevado a cabo sus semanas literarias, y, para ser honesta, no me daba grandes ganas de asistir… Todo empezó para mi cuándo llegué a Secundaria, la etapa en la que ya me tocaba a mi, formar parte de la velada.

Noté todo el trabajo que tiene que hacer la escuela, y como hay estudiantes que valoran muy poco lo que es esta semana.

¿Qué significa la semana literaria para mi? Conectarme con mi niña interior sería la respuesta más cerca. Es decir, desde pequeña, amo leer, ya que me lleva a un mundo totalmente diferente. Campoverde nos emplea eso día a día: la capacidad de ser niños otra vez.

Nos enseñan de libros muy valiosos para nuestro día a día, y que no sabemos apreciarlos.

Esta semana literaria estuvo bastante interesante. Los primeros dos días nos pusieron películas con la intención de que nos interesáramos en el libro y así leerlos. En mi caso, vi “La Habitación”, y tengo que aceptar que es la película más loca que he visto. Te mete demasiado en la trama de la protagonista, y claro que leeré el libro. El jueves llegó la yoga de la risa, la cuál fue una actividad bastante curiosa, ya que fue básicamente aprender a reír y ser feliz; por la tarde fue la velada literaria, en la cuál participaron estudiantes de secundaria y primaria presentando lo que habían preparado por meses. El último día de la semana literaria fue bastante cool, siendo sincera. Escogieron a algunos niños de preparatoria para asesorar a niños de primaria, acompañándolos a sus talleres de lectura. Haber ido a cada uno, me puso bastante nostálgica, recordándome lo inocente y feliz y ligeros de problemas que éramos. Me encantó.

Finalmente, quiero concluir diciendo que la semana literaria es bastante importante para las generaciones jóvenes del colegio, para que puedan crecer con el cerebro nutrido y con –imaginación hasta las nubes. 

Raquel López, estudiante de preparatoria