El juego online y su impacto en la economía española

Como veremos a continuación, las nuevas tecnologías son grandes responsables de la revolución del sector de los juegos de azar en España, que con los años ha ido ganando más peso dentro de la industria. El sector de los videojuegos, rivales pero a la vez aliados del juego online, está viviendo un momento glorioso en nuestro país, que no ha parado de crecer en la última década. En 2019, la producción de juegos llegó a los 900 millones de euros, ¿pero cómo se le compara el juego en línea?

Ingresos astronómicos

Según datos de la Dirección General de Ordenación del Juego (DGOJ), en 2019, el sector del juego online consiguió unos beneficios de 749 millones de euros. El margen fue de un 7.15 % más que el año anterior, una tendencia que hemos visto a lo largo del último lustro. El sector español se ha visto beneficiado con la aprobación de la Ley 13/2011 de regulación del juego en mayo de 2011, ya que fue entonces cuando se dio el visto bueno a las apuestas online e incrementó su popularidad.

También según la DGOJ, la modalidad de juego online preferida de los españoles son las apuestas de contrapartida en directo, con un 30,58 % de participación en 2019. A estas le siguen las máquinas tragaperras (20,94 %) y las apuestas de contrapartida convencionales (18,77 %). A la vez que su popularidad, las cantidades apostadas durante el juego en línea también han aumentado en nuestro país, alcanzando casi los 18.778 millones de euros en 2018.

Gran generador de empleo

El sector del juego en España supone el 0,9 % del PIB, mientras que la industria de los videojuegos equivale al 0,11 %. Esto ya nos ofrece una idea de la potencia del primero en la economía del país, aunque si nos fijamos en su peso en materia de empleo todavía entenderemos más su importancia como actor económico. En 2019, los videojuegos dieron trabajo a 6.900 profesionales dentro de nuestras fronteras, pero la industria del juego tuvo 300.000 empleados ese mismo año.

Es innegable la fuerza que tiene para la economía de un país que se sostiene principalmente en los sectores del turismo, inmobiliario y la automoción. Estos tres pilares han sido duramente golpeados por la crisis sanitaria actual, mientras que el sector de juego online solo se ha visto reforzado. El sector no solo da trabajo a aquellos que trabajan directamente en los casinos, ya sean presenciales o en línea, sino que ha motivado también la contratación de empleados en nuevos medios de comunicación especializados o la inversión en publicistas.

Líder en e-commerce

Otro elemento clave para entender el papel actual del juego online en España son las transacciones de comercio electrónico. Según datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), los juegos de azar son el segundo sector en transacciones de e-commerce, solo por detrás del mercado de transporte terrestre de viajeros. Esto significa que los españoles solo utilizan el sistema de pagos online con más asiduidad para pagar billetes de tren o autobús.

Estos datos seguramente tienen mucho que ver con el perfil típico del jugador online en España. Más del 80 % tiene una edad comprendida entre los 18 y los 45 años, el mismo segmento de la población que utiliza Internet más a menudo para realizar compras.

Las razones del éxito

¿Pero a qué se debe todo este éxito? Además de la nueva regulación, que le ha puesto al sector las cosas mucho más fáciles, no puede negarse el favorable impacto que han tenido las nuevas tecnologías. Los casinos online cada vez tienen unas interfaces más sofisticadas, que reproducen casi a la perfección la experiencia de una casa de apuestas tradicional. Para jugar al poker, así, ya no hace falta ir al casino más cercano. Estar en casa es más cómodo y te da la posibilidad de jugar a cualquier hora del día sin necesidad de desplazarte.

Pero todo ello no serviría de mucho sin una buena campaña de marketing que consiga atraer a más y más jugadores y jugadoras. Ayudarse de personajes famosos como presentadores de televisión o deportistas es imprescindible para superar esa mala reputación que el sector todavía acarrea. En una sociedad cada vez más digitalizada, no es de extrañar que el juego de apuestas se haya puesto las pilas y haya logrado reinventarse con éxito en el mundo digital.