Leo Messi se quiere ir del FC Barcelona y no son pocos los clubes que ya hacen cuentas para tratar de hacerse con su fichaje. No es para menos. La llegada del argentino, además de suponer un enorme salto de calidad en lo deportivo y convertirlo en aspirante -si no lo fuese ya- a todo, también lo sería en lo económico. El impacto que tendría Messi en su nuevo equipo se traduciría en una mayor repercusión del club en todo el mundo, lo que llevaría consigo un aumento considerable en ingresos.
Manchester City, Manchester United e Inter de Milán parecen ser los únicos equipos en disposición de hacerse con el futbolista del Barça. Cualquiera de ellos tendrá que hacer un importante desembolso por hacerse con sus servicios. Sólo su salario estaría en torno a 100 millones de euros brutos por temporada, suponiendo que -como pretende el jugador- consiga salir gratis del conjunto azulgrana.
Sin emabargo, su fichaje estaría más que amortizado debido a los importantes contratos que se podrían firmar por el simple hecho de tener a Messi en su plantilla. Una situación que bien conocen en la Juventus, que después de fichar a Cristiano Ronaldo se ha posicionado como uno de los clubes que más genera en el mundo.
En el caso de la ‘Vecchia’, sus acciones en bolsa se dispararon, incrementándose su valor un 66% en la primera temporada con el luso en el equipo. A ello hay que sumar la mejora de contratos con sus principales patrocinadores. Adidas renovó por ocho temporadas su contrato con el equipo turinés por ocho años, pero por el doble del valor del antiguo, alcanzando los 51 millones por temporada, situación parecida a la que sucedió con Jeep, sponsor que luce en su camiseta.
Las ventas de camisetas se incrementaron considerablemente en todo el mundo, junto con la interacción en redes sociales y, como no, la influencia en los medios. Desde entonces, todo lo que pasa en la Juventus es noticia y tiene un mayor impacto del que tenía antes de la llegada del luso, situación que se daría en el nuevo equipo de Messi.
Por contra, en el Barcelona sucederá lo contrario. El conjunto catalán, ahogado por una grave crisis económica, se verá practicamente obligado a renegociar sus contratos a la baja con la salida del argentino. Pese a liberar una importante montante de la masa salarial, los ingresos caerán de manera considerable en la entidad culé.