Enésimo récord en gasto en pensiones. La Seguridad Social ha informado que en el mes de agosto destinó en el mes de agosto 9.904 millones de euros al pago de pensiones contributivas, lo que se traduce en un 2,3% más que en el mismo mes del año anterior, según ha informado este viernes el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. En julio la nómina de las pensiones se situó en 9.880 millones.
En concreto, en la nómina de agosto se han abonado 9.777.556 pensiones contributivas, 10.506 prestaciones más que en el séptimo mes del año. Más de dos tercios de la nómina se destinó al abono de las pensiones de jubilación, que sumaron un importe de 7.092,19 millones de euros, casi un 2,9% más que en agosto del año pasado, tal y como ha explicado el departamento de José Luis Escrivá.
Según los datos del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS), a las pensiones de viudedad se destinaron 1.710,3 millones de euros, un 1,5% más que hace un año, mientras que a las prestaciones por incapacidad permanente se dedicaron 936,2 millones de euros (-0,34%). Por su parte, al pago de las prestaciones de orfandad se destinaron 139,8 millones (+1%), y a las prestaciones a favor de familiares, 25,4 millones de euros (+3,08%).
La pensión media de jubilación alcanzó en agosto los 1.164,31 euros, un 2,1% más que el año pasado, mientras que la pensión media de viudedad fue de 727,04 euros al mes (+1,97%).
La pensión media del sistema, que comprende las distintas clases (jubilación, incapacidad permanente, viudedad, orfandad y a favor de familiares), aumentó un 2,07% interanual, hasta situarse a 1 de agosto en 1.012,94 euros mensuales.
Nuevas altas
Las nuevas altas de pensiones de jubilación en julio han aumentado un 3,1% en comparación con el mismo periodo del año anterior, con una media de 1.379 euros al mes, llegando a 1.500 euros para las procedentes del Régimen General.
Desde enero hasta julio de 2020 han causado alta 293.752 nuevas pensiones, un 14,8% menos que en el mismo periodo de 2019, mientras que han causado baja 317.669 pensiones, un 12,9% más que el año anterior, datos en los que influye el cierre de oficinas durante el estado de alarma, pero también la mortandad asociada por el impacto de la crisis del coronavirus que ha afectado en mayor medida a las personas de mayor edad.