El adelanto urbano llega en cuentagotas a San Juan de Manta

Este sitio se halla al suroriente de la ciudad de Manta, más allá de la zona donde se encuentran el depósito municipal de disposición de desechos sólidos y las lagunas de oxigenación del agua servida en la urbe. Los pobladores son esencialmente agricultores u obreros del sector de la construcción y viven marginados del progreso citadino.

A lo largo de los últimos 40 años la obra pública, básicamente municipal, le ha estado llegando con cuentagotas. Por esto es una novedad en el pueblo cuando alguna obrita aparece por allí, como en este momento que les pavimentan tres callecitas cortas en el Barrio San Antonio (dos longitudinales y una transversal).

El fiscalizador municipal, ingeniero Santos Suárez Ponce, precisó que la pavimentación se hará con una capa de hormigón armado de 15 cm de espesor, pero primero se ha hecho el cambio de suelo indispensable y el mejoramiento de la sub-base con un piso de 15 cm de espesor, sumándose a ello los bordillos exteriores de las aceras.

La dimensión de las tres calles en arreglo suma 2.300 m2 en una longitud de 400 metros. El costo de las obras es de 120.000 dólares, más IVA, y el plazo de ejecución es de 60 días hasta principios de enero del próximo año 2019.

Como parte de los trabajos también se ha removido una tubería que había sido instalada sin asesoría técnica por iniciativa de la comunidad local y que se ha reinstalado convenientemente, pero según el fiscalizador aludido esto no está contemplado en el contrato de construcción y es un cargo inesperado para el contratista.

La realización de estos trabajos, en todo caso, reanima a los moradores del barrio y les induce a formular frases de agradecimiento y elogio para el Gobierno municipal de Manta en funciones.

Mary Pilligua, por ejemplo, comentó que “gracias a Dios ya el Municipio está haciendo la carretera. Me alegro por estas obras porque en invierno no se podía caminar bien porque salía toda enlodada. Ahora ya se podrá usar zapatos altos para salir a las fiestas de diciembre”.

Y Gisella Zambrano no se quedó atrás. Dijo: “Los moradores de San Antonio nos sentimos beneficiados, porque gracias al alcalde ya vamos a caminar sin majar lodo. Vamos a poder celebrar la Navidad sin que los niños se ensucien de tierra; por eso mi hija quiere patines para andar en la calle nueva”.