NUEVO DEBATE DEL PARAMO DE SANTURBAN

Luego de que líderes ambientales criticaran al gobierno colombiano por haberle quitado cerca de 30 000 hectáreas al páramo, varias  comunidades de pueblos mineros en Santander aseguran que esto no serviría para el desarrollo del sector  pecuarias y minería  ya que al hacer esto perderían la única entrada  económica que tenían para mejorar la calidad de vida de familias que con la dificultad  hacían todo lo posible para explotar oro de manera responsable con el medio ambiente, debido a esto muchos comenzaron a vender sus tierras a compañías que tuvieran un mayor músculo financiero como fue el caso de Greystar (luego Eco Oro) que luego desistió del polémico proyecto Angostura que tenía en la región y ahora con Minesa, una compañía del grupo Mubadala, fondo de inversiones del gobierno de los Emiratos Árabes Unidos.

Aunque la delimitación del páramo era necesaria para garantizar el abastecimiento de agua a más de 2 millones de personas del gran Santander, el gobierno colombiano no analizo la magnitud del daño económico que esta decisión tendría sobre cientos de familias que dependían de la minería ilegal de la zona.

Sería bueno que el gobierno como otros participantes de la defensa del páramo entran a diálogos con los habitantes de estas zonas para saber que necesidades tienen estas comunidades y que otras opciones económicas pueden brindarles.