Argentina, aborto legal, seguro y ¿Gratuito?
En Argentina cada día toma más importancia y repercusión el tema del aborto y la despenalización de este. Si bien el Código Penal Argentino, articulo Nº89 dice:
“... El aborto practicado por un médico diplomado con el consentimiento de la mujer encinta, no es punible:
1º) Si se ha hecho con el fin de evitar un peligro para la vida o la salud de la madre y si este peligro no puede ser evitado por otros medios;
2º) Si el embarazo proviene de una violación o de un atentado al pudor cometido sobre una mujer idiota o demente. En este caso, el consentimiento de su representante legal deberá ser requerido para el aborto.”
Aunque igualmente, hay mujeres que están dentro de esas causales, en el marco de la ley y siguen encontrando muchísimos obstáculos para tener un aborto. Entiendo la lucha que se está llevando a cabo por la despenalización de este, pero en lo que discrepo absolutamente es que sea gratuito.
¿Por qué?
Fácil, Argentina es un país que está en decadencia, tiene alrededor de un 30% de población debajo del umbral de la pobreza, una inflación anual que supera desde hace décadas el 20%. Aun así, el país cuenta con educación y salud pública; ambas de muy mala calidad. Pero me quiero enfocar principalmente en la salud pública.
Argentina es el país latinoamericano que más invierte en salud, y aun así, cada año esta parece estar peor según las mismas personas que se atienden en estos lugares. Nada más ni nada menos que el 36% de la población no cuenta ni con una obra social, una prepaga ni una cobertura por un programa o plan estatal de salud. Si bien la inversión que se realiza es grande, uno de los principales problemas que tenemos actualmente es la falta de capital humano; situación que empeora en las provincias del norte del país, en la que los profesionales se ven tentados con las ofertas de Brasil, donde cobran casi el triple que en Argentina y trabajan en mejores condiciones. A esto se le suma, la falta de equipos o la nula actualización de estos por lo que hay hospitales que no cuentan ni con el personal ni con los equipos para realizar cuestiones básicas para la salud.
Incluso con todos estos inconvenientes, se sigue pidiendo que el aborto sea gratuito; cosa que de ser así, terminaría de condenar la lamentable situación de los hospitales públicos ya que esto implica un alto gasto que, actualmente Argentina no puede cubrir.
Suiza, un país con altos ingresos, tiene el aborto legal, seguro y gratuito. En el año 2012, se practicaron poco más de 11.000 abortos, cada uno le cuesta entre 500 y 800 euros al Estado, que sería alrededor de €7.150.000 por año. En Argentina, sin estar despenalizado, se practican alrededor de 500.000 abortos por año; si utilizamos el mismo valor que en Suiza (€650 por aborto), gastaría unos €325.000.000 que serían alrededor de siete mil ochocientos millones (7.800.000.000) de pesos por año solamente en abortos. El PBI de Argentina en 2017 fue de €130.211.000.000; por lo que los €325.000.000 representarían un 0.25% del PBI, es decir, que 1 de cada 400 euros son destinados a la realización del aborto. Y eso es solamente ahora, que el aborto no está despenalizado, por lo que es normal intuir que esta cifra podría subir. Por estas razones, yo creo que Argentina actualmente con la situación económica que tiene, no puede permitirse financia el aborto.
Esta web se reserva el derecho de suprimir, por cualquier razón y sin previo aviso, cualquier contenido generado en los espacios de participación en caso de que los mensajes incluyan insultos, mensajes racistas, sexistas... Tampoco se permitirán los ataques personales ni los comentarios que insistan en boicotear la labor informativa de la web, ni todos aquellos mensajes no relacionados con la noticia que se esté comentando. De no respetarse estas mínimas normas de participación este medio se verá obligado a prescindir de este foro, lamentándolo sinceramente por todos cuantos intervienen y hacen en todo momento un uso absolutamente cívico y respetuoso de la libertad de expresión.
No hay opiniones. Sé el primero en escribir.