Por: Editorial.
Hay que tener en cuenta la importancia de la cita que tienen los colombianos el domingo 11 de marzo en las urnas de votación. No hace falta buscar mucho para encontrar la razón, por lo menos en lo que se relaciona al Congreso. Los casos de corrupción, teniendo en cuenta como éste ha perdido su cercanía con el pueblo y sus peticiones, representan una imagen negativa de este cuerpo legislativo.
Un aspecto notable es que tanto la izquierda como la derecha pueden poner este domingo a votación la escogencia de su representante a la presidencia. Este, sin duda, es un hecho que motiva la comunidad y fortalece la democracia.
En el plano legislativo, hay que tener en cuenta que esa “renovación” del Congreso permita erradicar todo aquello que ha contribuido a su mala imagen, desde la famosa “mermelada” hasta el paramilitarismo involucrado con personajes políticos. Para ello basta entender la importancia de acudir a las urnas y, una vez allí, tener claro el valor de votar. Saber que no votar a consciencia es renunciar a la esperanza de que nuestros hijos y nietos puedan desarrollar sus vidas en mejores condiciones, en comparación con lo que hoy existe.
Procede igualmente un llamado a las autoridades civiles, electorales y militares para que cumplan a cabalidad con su deber de evitar incidentes de todo tipo. Estas situaciones no pueden ocurrir de ningún modo. Para ello hay que tomar todas las precauciones necesarias.
Otra amenaza que no puede menospreciarse es la de la confusión que buscan crear las noticias falsas que circulan por las redes sociales. Contrarrestarla es una tarea que no tiene que correr únicamente por mano del Estado. Es hora de que los colombianos sepan cuándo dar credibilidad a una red social. Verificar con fuentes confiables si es real lo que se comenta en WhatsApp, Twitter o Facebook es cada vez más un indicador de madurez política de una sociedad.
Será también novedad, y hecho histórico, que por primera vez se lleven a cabo unas elecciones con la Farc como partido político y no como grupo armado. De entrada, ello deberá traducirse en un marco de tranquilidad, en el que se sabrá a ciencia cierta el tamaño del respaldo popular con que cuenta el nuevo grupo político. De modo que los colombianos debemos acudir a las urnas conscientes del deber ciudadano, del compromiso democrático y de lo que está en juego para el país.Hay que tener en cuenta la importancia de la cita que tienen los colombianos el domingo 11 de marzo en las urnas de votación. No hace falta buscar mucho para encontrar la razón, por lo menos en lo que se relaciona al Congreso. Los casos de corrupción, teniendo en cuenta como éste ha perdido su cercanía con el pueblo y sus peticiones, representan una imagen negativa de este cuerpo legislativo.
Un aspecto notable es que tanto la izquierda como la derecha pueden poner este domingo a votación la escogencia de su representante a la presidencia. Este, sin duda, es un hecho que motiva la comunidad y fortalece la democracia.
En el plano legislativo, hay que tener en cuenta que esa “renovación” del Congreso permita erradicar todo aquello que ha contribuido a su mala imagen, desde la famosa “mermelada” hasta el paramilitarismo involucrado con personajes políticos. Para ello basta entender la importancia de acudir a las urnas y, una vez allí, tener claro el valor de votar. Saber que no votar a consciencia es renunciar a la esperanza de que nuestros hijos y nietos puedan desarrollar sus vidas en mejores condiciones, en comparación con lo que hoy existe.
Procede igualmente un llamado a las autoridades civiles, electorales y militares para que cumplan a cabalidad con su deber de evitar incidentes de todo tipo. Estas situaciones no pueden ocurrir de ningún modo. Para ello hay que tomar todas las precauciones necesarias.
Otra amenaza que no puede menospreciarse es la de la confusión que buscan crear las noticias falsas que circulan por las redes sociales. Contrarrestarla es una tarea que no tiene que correr únicamente por mano del Estado. Es hora de que los colombianos sepan cuándo dar credibilidad a una red social. Verificar con fuentes confiables si es real lo que se comenta en WhatsApp, Twitter o Facebook es cada vez más un indicador de madurez política de una sociedad.
Será también novedad, y hecho histórico, que por primera vez se lleven a cabo unas elecciones con la Farc como partido político y no como grupo armado. De entrada, ello deberá traducirse en un marco de tranquilidad, en el que se sabrá a ciencia cierta el tamaño del respaldo popular con que cuenta el nuevo grupo político. De modo que los colombianos debemos acudir a las urnas conscientes del deber ciudadano, del compromiso democrático y de lo que está en juego para el país.
Esta web se reserva el derecho de suprimir, por cualquier razón y sin previo aviso, cualquier contenido generado en los espacios de participación en caso de que los mensajes incluyan insultos, mensajes racistas, sexistas... Tampoco se permitirán los ataques personales ni los comentarios que insistan en boicotear la labor informativa de la web, ni todos aquellos mensajes no relacionados con la noticia que se esté comentando. De no respetarse estas mínimas normas de participación este medio se verá obligado a prescindir de este foro, lamentándolo sinceramente por todos cuantos intervienen y hacen en todo momento un uso absolutamente cívico y respetuoso de la libertad de expresión.
No hay opiniones. Sé el primero en escribir.