Estos dos términos, la ética y la moral, se manejan de manera indistinta, pues están muy vinculados el uno con el otro. Ambos deben estar siempre presentes como una reflexión que despierte la conciencia del individuo, motivándolo a demostrar una conducta adecuada, que respete los códigos universales, los cuales sirven para inspirar las mejores prácticas y el buen comportamiento. Queda entendido que los hombres son responsables de sus actos y que la libertad, a la cual tienen derecho como seres humanos, debe estar limitada por estas disposiciones.
La empatía se vuelve un gran activo empresarial
Denostada durante décadas por ser una ‘habilidad blanda’, casi imposible de medir y fuente de estudios y conclusiones muy subjetivas, la empatía viene ganando terreno y protagonismo recientemente en estudios de economía, empresas y liderazgo.