El clásico a pié de campo

Eran las 18:00 de la tarde y las puertas del Camp Nou ya estaban llenas. Se podía sentir la pasión de los aficionados, era un día importantísimo, el clásico. Pasada una media hora, a las 18:30 de la tarde se abrieron las puertas y los aficionados empezaron a entrar eufóricos, el entusiasmo de los asistentes era increíble.

El Camp nou a las 18:45 estaba completo, 95.000 aficionados blaugrana a punto para animar a su equipo, justo cuando salía el equipo local a calentar, la ovación era absoluta. Seguidamente se cantaron las alineaciones de ambos equipos, la del equipo visitante, el Real Madrid, fue fuertemente abucheada. La del Fc Barcelona fue aplaudida.

A las 19:00 pm comenzaba el primer tiempo. El silbato sonó y los gritos de pasión de los aficionados no se hicieron esperar. Las olas hechas por todos, los silbidos, los aplausos. Los saltos de emoción cada vez  que el Barcelona se acercaba al marco contrario.

Minuto 25 del primer tiempo, ocasión clara para el conjunto local que no era capaz de culminar, el tablero seguía 0-0, ambos equipos estaban dando lo mejor de sí para obtener la ventaja, que aún no ocurría.

El Barcelona estaba disputando un buen partido, reinaba en el campo, era dueño de la posesión y tenia el control del partido, pero el Real Madrid permanecía cerrado y con una buena defensa.

El primer tiempo culminó con un tiro de falta de Leo que se marcha por encima del marco.

Durante el descanso los aficionados lamentaban la ocasión fallada tan clara de Suárez, pero las sensaciones eran buenas.

El segundo tiempo empezaba con movimientos en las filas visitantes, Zidane había hecho un cambio táctico al medio campo para intentar tener más control del balón. Durante los primeros minutos se podía apreciar que así era, se observaba un mayor control del equipo blanco, había tensión en los aficionados locales.

Minuto 55 de juego, el Madrid disponía de un saque de esquina peligroso, que el guardameta del Barcelona despejaba sin demasiados problemas dando paso a un contra ataque de su equipo que acababa con el primer tanto en el marcador, se prendía la locura en el Camp Nou. Messi una vez más demostraba que en los momentos complicados estaba el para sacar el equipo adelante.

El Real Madrid se mostraba débil después del gol, se notaba que encajar aquel gol en sus mejores momentos del partido le había hecho mucho daño, y el Barcelona aprovechaba esta incertidumbre de los blancos para culminar el partido en el minuto 64 con otro tanto del argentino.

Los últimos minutos del partido fueron de toque blaugrana en el centro del campo, el Real Madrid estaba abatido; la afición estaba festejando la victoria de su equipo ya.

El partido acabó con el 2 - 0 para el Barcelona, y con un largo aplauso y ovación de los aficionados a su equipo. El Camp Nou había vivido otra noche mágica de fútbol en su césped.