EDITORIAL:
Vanessa Ayol A.
Meses antes del asesinato del fotoperiodista mexicano Rubén Espinosa en la Ciudad de México a finales de julio, todos los periodistas huyeron por proteger su vida.
Los asesinatos registrados en México son habituales, frecuentemente se han conocido varias noticias espeluznantes, como el caso del reportero Maximino Rodríguez, quien fue asesinado el viernes 14 de abril, en un estacionamiento en La Paz.
Los periodistas se sienten intimidados, porque a la primera información que emitan, pueden ser callados con un disparo.
Los atentados son con los periodistas, se han registrado 4 asesinatos en las últimas fechas, esto origina que México se convierta en uno de los países con más peligro para ser periodista.
Por estos homicidios hay cuatro personas que recibieron prisión, pero ninguno ha sido sentenciado a la fecha.
La gente de ahí esta atemorizada y piden que ya todo termine, el gobiernodel país no se pronuncian sobre este tema, pretenden no hacerse cargo del tema.
Tal vez si esto sucediera en otros países, ya se hubiera discutido y dado una solución, es un tema de suma importancia y preocupación, se debería dar soluciones rápidas.
Para poner punto final a los ataques a la prensa, el Presidente Peña Nieto debe tomar medidas firmes. Limitarse a investigar a fondo las agresiones del pasado y lograr sentencias adecuadas es lo necesario ahora, debe tomar medidas específicas para resguardar a los periodistas que ponen su vida en riesgo para ejercer su labor.
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