Educación saludable

     La parte pedagógica y emocional de las personas han sido los más afectados estos meses de pandemia, y por esto es necesario recordar la importancia que tiene el adquirir conocimientos y destrezas nuevas por parte de cada persona, para así, involucrarse en la sociedad con ideas políticas, en igualdad, con derecho a la crítica, tolerancia, solidaridad y un desarrollo integro. Por esto motivo, a continuación resaltamos algunos de los factores que demandan la mayor atención del presupuesto público las cuales afectan en el financiamiento del sector educativo:

• Educación privada: El cierre parcial y gradual por parte de este sector tiene diversas causas, de las cuales resaltan el empobrecimiento de las familias al no tener una trabajo estable,  en donde es casi imposible acceder a la educación, junto con el incremento  de moras en los pagos de  servicios de los establecimientos.
• Formación docente: Ya que la virtualidad nos tomó de sorpresa a todos, específicamente a las instituciones educativas, las cuales probablemente no estaban preparadas tecnológicamente para adaptar sus aulas a la virtualidad, los programas y actividades pedagógicas tradicionales se vieron en la necesidad de enfocar sus pedagogías desde la parte virtual, para así, prestar un mejor apoyo logístico a los estudiantes.
• Políticas socioeducativas: Con el aumento de la pobreza, los apoyos en educación, útiles, matriculas e incentivos educativos se ampliaron, para incentivar a los estudiantes y frenar la deserción escolar.
• Cuestiones sanitarias y de infraestructura: En el corto plazo, habrá que preparar las escuelas para el regreso; en el mediano y largo, las principales tareas pendientes serán la readecuación de los espacios y la ampliación de la red escolar disponible.
• Tecnología y recursos digitales: La crisis puso en evidencia la carencia de dispositivos y acceso a internet, principalmente, por parte de los hogares de menores recursos; este déficit, fue uno de los más mencionados en redes sociales y medios de comunicación, pues es inconcebible que en "plena era tecnológica" es precisamente la tecnología y los recursos derivados de ella, los más precarios e inasequible.
• Salarios docentes: Esta es la más política de las presiones que se avecinan sobre los presupuestos y la coyuntura actual, generó un déficit monetario en el que algunas instituciones se vieron en la obligación de bajar os salarios de sus asociados, en donde los docentes no se quedaron atrás.

     Cada una de las situaciones descritas anteriormente generan que por arte de los gobernantes haya una respuesta inmediata, con el fin de satisfacer las necesidades planeadas por cada uno de los actores involucrados en el desarrollo del proceso educativos, y es por esto que la respuesta a estas inquietudes debe contundente y rápida. Es claro que en muchos países la situación de la educación antes de la pandemia ya se caracterizaba por aprendizaje bajo (caso Colombia) y por esto mismo, ya  es hora de proponer y generar nuevas estrategias para que ciudadano posean derechos reales para acceder aa servicios de educación superior de calidad.

Referencias

Morduchowicz, A. (2020, 29 mayo). La inversión educativa en tiempos de post pandemia. Recuperado 20 de noviembre de 2020, de https://blogs.iadb.org/educacion/es/inversioneducativapostpandemia/