LA MARBELLA DESCONOCIDA

Marbella, al igual que otras muchas ciudades costeras, dispone de un casco histórico que es desconocido por muchos de sus visitantes. El turismo de playa suele ensombrecer al turismo cultural que posee esta ciudad. El hecho de que Marbella posea una amplia distribución de su casco urbano provoca que muchas personas la conozcan tan solo por alguna de sus partes más representativas. Por ejemplo, la zona del puerto deportivo de Puerto Banús y su zona residencial es conocida tanto nacional como internacionalmente casi de forma exclusiva.

Ante esto, desde esta revista de la Oficina Virtual de Turismo siempre recomendamos visitar el casco histórico de todas las ciudades y, a ser posible, hacerlo mediante visitas guiadas para aprovechar mejor el tiempo y conocer los mejores rincones de cada una de las ciudades.  El conjunto de calles estrechas y laberínticas que conforman Marbella con una excelente conservación y una bonita decoración floral, hacen que esta ciudad sea un lugar especial para pasear a cualquier hora del día. Además, en su casco antiguo existen varias zonas que debes visitar durante tu estancia.  Un ejemplo es el Parque de la Alameda de Marbella, un lugar idóneo para estar bajo la sombra de sus impresionantes árboles en los días de más calor. Además, allí hay numerosos bancos con losetas que hacen referencia a diferentes puntos de interés turístico de la ciudad.

En el centro, hay una hermosa fuente que hace alusión a la Virgen del Rocío. Ahí se puede ver la representación de una gran cantidad de hermandades en la que hay escudos de otras muchas ciudades que realizan el camino hacia el Rocío.  Además, bajando por unas escaleras situadas en este parque, accederás al Paseo de la Avenida del Mar, un lugar maravilloso en el que puedes contemplar réplicas del genio Dalí que hacen referencia a sus principales obras. Este paseo te guiará hasta la playa de Venus. Si tienes la suerte de ir en un día despejado, desde el final de este paseo puedes contemplar unas vistas maravillosas del mar Mediterráneo, de Gibraltar y del monte hacho del continente africano.

Para acceder al casco antiguo, retrocede hasta las mismas escaleras que has bajado antes para cruzar hacia el otro lado, a la Avenida Ramón y Cajal. Antes de entrar en él, hay una bonita escultura de La Bella del Mar, una escultura de una mujer montada sobre un caballo que representa a todas aquellas personas que han hecho que Marbella se encuentre en el top internacional del turismo. Al adentrarte al casco antiguo, puedes observar un conjunto de callejuelas estrechas y curvas muy similares a las calles de otras ciudades de procedencia musulmana que están ubicadas en la parte antigua de la ciudad.

Puedes visitar una serie de monumentos interesantes como es la capilla del antiguo hospital de San Juan de Dios del siglo XVI. Además, cerca del casco histórico y por la periferia, existe una ruta de capillas en diferentes puntos de la ciudad que el visitante se va a encontrar en diferentes esquinas y lugares del casco histórico. Muy cerca del antiguo hospital, está la iglesia de Nuestra Señora de la Encarnación del siglo XVII y, en la misma plaza de la iglesia, puedes ver restos de murallas del antiguo castillo árabe de la ciudad. Desde estas murallas, puedes acceder a la plaza principal del casco histórico: la Plaza de los Naranjos. En esta plaza se encuentran varios monumentos destacables de Marbella como son la Casa Consistorial de Marbella del siglo XVI que alberga el ayuntamiento y la antigua Casa del Corregidor con su impresionante fachada de ese mismo siglo.

En definitiva, muchos turistas acuden principalmente a Marbella para disfrutar de las playas de la Costa del Sol y dejan a un lado la historia de la ciudad. Es muy interesante conocer los acontecimientos importantes que tuvieron lugar en la ciudad y, si lo haces mediante una visita guiada,  podrás ver conocer numerosas curiosidades y anécdotas que entraña esta maravillosa ciudad. ¡No te lo pierdas!