Cuando visites Cádiz, una de las actividades que debes realizar es ver su puesta de Sol. Son varios los sitios que existen para disfrutar de ese momento y aquí te dejamos algunos de los mejores que por lo general muchos guías de Cádiz recomiendan en todas sus visitas.
1.- PLAYA DE LA CALETA
Sin duda, uno de los lugares estrella (por no decir el que más), par admirar las puestas de sol de Cádiz. La Caleta ya tiene su especial encanto durante el día, pero realmente se muestra en su máximo esplendor cuando cae la noche… Para poder tener una buena panorámica, tenemos que situarnos en el corazón del paseo marítimo, decorado con farolas de estilo gótico que rodean la playa. Justo detrás podemos apreciar los dos inmensos ficus centenarios que fueron un regalo de Sudamérica, y que por la noche, son iluminados de tal forma que parecen sacados de un cuento de hadas. La Caleta, visualmente, no tiene comparación ninguna con el resto de playas, ya que todo lo que compone su paisaje, hace que la puesta de sol sea aún más espectacular; como por ejemplo las barquitas pesqueras ondeando en su orilla, los castillos de San Sebastián y Santa Catalina que la abrazan, o el simbólico Balneario de la Palma y el Real. Sitios desde los cuales también podemos apreciar el atardecer. Durante el invierno, la puesta de sol comienza sobre la media tarde (entre las 18:00 y las 18:30). Sin embargo, en verano es mucho más tardía, comenzando así a esconderse el sol sobre las 20:30 aproximadamente. A pesar de la diferencia horaria según la estación, la espectacularidad de las vistas es exactamente la misma. Al comienzo del atardecer, el cielo de la Caleta se tiñe de una gama de colores que varían desde un tono anaranjado, pasando por un amarillo intenso y contando también con unas pinceladas de color salmón o incluso algún toque azul. Pero lo que realmente la hace única, es la forma en la que se refleja en el mar, y por lo tanto, también en la bóveda del Balneario de la Palma. Este es, sin duda, uno de los enclaves favoritos de los gaditanos y de cualquier persona que haya tenido la suerte de poder observar tal maravilla.
2.- PASEO Y MIRADOR DE SANTA BÁRBARA
Este podemos situarlo justo detrás del gran Parque Genovés (único parque del casco histórico de Cádiz), y junto al Hotel Parador Atlántico. Es el encargado de conectar el final de la Alameda Apodaca con el principio de la Playa de la Caleta.
Hace aproximadamente unos 5 años, el ayuntamiento propuso un proyecto para la reordenación de la zona de Santa Bárbara, incluyendo así la urbanización del paseo, la creación de una infraestructura de separación con el Parque Genovés, la creación de un gran parking subterráneo y la remodelación del Teatro Pemán. Esta pérgola-mirador cuenta con una parte inferior cubierta acristalada, y por supuesto con la zona superior (de unos 400 metros de longitud), que es la que se encuentra al aire libre y desde las que podemos apreciar unas maravillosas vistas. También cuenta con una explanada que contiene zonas deportivas e infantiles, y algunas partes ajardinadas. A pesar de ser un mirador público, tiene un horario de apertura que es desde las 8 de la mañana hasta las 9 de la noche; exceptuando en verano que cierra dos horas más tarde, es decir, a las 11. En el paseo superior, tiene una doble capa traslúcida retroiluminada con colores entre sus muros que de noche crea una sensación indescriptible. Pero todo esto queda atrás cuando la puesta de sol comienza, y a medida que avanzan los minutos (ya que el espectáculo suele ser muy breve), podemos ir apreciando la combinación de colores muy distinguidos como son el rosa, morado o malva y azul oscuro. Mencionar como curiosidad, que hace muchos años en este mismo lugar era donde antiguamente se realizaba la Feria de Cádiz.
3.- ALAMEDA APODACA
Inicialmente estos terrenos eran conocidos como la “Caletilla de Rota”, pero su nombre original es “La Alameda Apodaca y del Marqués de Comillas”. Es uno de los paseos ajardinados más hermosos y por lo tanto más frecuentados de la capital. Su extensión comienza en las llamadas Murallas de San Carlos, pasando por el Baluarte de la Candelaria y finalizando en el Parque Genovés y el Paseo de Santa Bárbara. Su disposición es realmente buena, ya que está protegida de los temporales y el viento de levante. A su vez, ha sido reformada en numerosas ocasiones, hasta adquirir el estilo regionalista que sigue conservando en la actualidad. Su inmenso paseo sevillano está, al igual que la Caleta, adornado con numerosas farolas góticas sobre la balaustrada. Una de las características principales de este lugar, es la distribución de sus glorietas y plazoletas (decoradas con cerámica sevillana y elementos de forja), que oscilan entre formas circulares y rectangulares. Todas ellas decoradas con pérgolas cubiertas por buganvillas. En el epicentro, podemos encontrar el monumento al Marqués de Comillas. Otro aspecto fundamental a destacar es su vegetación, ya que cuenta con frondosos árboles de hoja caduca, entre los que podemos encontrar dos ejemplares de ficus (a diferencia de los de la Caleta, éstos son procedentes de Australia), y algunos plataneros. Cuando el sol comienza a esconderse, este lugar se convierte en el sitio de encuentro perfecto para las parejas de enamorados, ya que adquiere un ambiente muy romántico y de hecho, es muy popular porque en él se realizan numerosos reportajes fotográficos de bodas. Importante mencionar que está incluida dentro de la lista de Jardines de Interés Cultural.
4.- EL PELÍCANO Y PUERTAS DE TIERRA
Este pub/café “El Pelícano”, se encuentra en uno de los laterales de las Puertas de Tierra, que separan la parte nueva de la ciudad, del casco histórico de Cádiz. El propio local se encuentra dividido en dos zonas, la parte de la terraza que da al paseo del Campo del Sur, y la zona interior (situada dentro de las murallas, detalle que le brinda gran particularidad). Se denomina “Music Café”, ya que periódicamente se hacen espectáculos de música. Mencionar también que es punto de encuentro para grupos de intercambio de idiomas. Por todo ello, cuenta con gran interés social y cultural. Pero lo que más llama la atención de este lugar, es su localización. Tiene unas vistas maravillosas debido a uno de los monumentos más significativos de la ciudad como son las murallas militares del siglo XVIII, conocidas para los gaditanos como “Puerta Tierra”. Éstas están compuestas por una bóveda central, dos torreones en sus extremos y un paseo superior (todo ello abierto al público desde el 2013). La entrada es totalmente gratuita, pero hay que consultar el horario de visitas, ya que cambia según la estación. Cabe resaltar que en ellas podemos encontrar el Museo de Taller Litográfico, y el Museo del Títere. La puesta de sol desde ambas zonas es impresionante, ya depende de las circunstancias en las que queramos admirar el paisaje. Bien podemos hacerlo desde una de las mesitas de la terraza de El Pelícano mientras nos tomamos un café en invierno o algún tentempié en verano; o bien desde el paseo superior de las murallas. Como dato curioso, mencionar que ante el crecimiento de la ciudad, se barajó la posibilidad de derribar el conjunto y poder así mejorar el acceso de los vehículos al casco antiguo. Pero finalmente se optó por el relleno de los fosos y la apertura de dos nuevos arcos en la muralla para mejorar la situación.
5.- PLAYA SANTA MARÍA DEL MAR
Esta maravillosa playa situada en la parte nueva de la ciudad, es otro de los enclaves que no podían faltar en la lista. Aquí también tenemos sitios donde elegir para admirar la despedida del sol. Podemos hacerlo o bien desde los finos y dorados granos de la arena de su playa, desde el paseo semicircular superior que está junto a la rampa de bajada y acceso a la playa, o bien desde el mirador de cristal llamado “Plaza de la Estrella”. Éste mirador, que más bien podríamos definirlo como un balcón que está metido en plena playa de Santa María del Mar, cuenta con varios bancos, una torre vigía y está custodiado por una pequeña muralla de cristal, para poder mantener las vistas. Da igual la época del año que sea, ya que las circunstancias siempre van a ser idóneas debido a su localización y perspectiva. Pero debemos tener en cuenta que en el momento en el que la marea está más alta, la arena desaparece casi por completo. Su belleza paisajística es indescriptible, ya que, por ambos lados, cuenta con dos largos espigones de rocas, y en la parte derecha podemos observar, en una cercana lejanía, gran parte del casco histórico (como son las torres y cúpula de la Catedral de Cádiz, el Campo del Sur y el Castillo de San Sebastián destacando su faro). Y a la hora clave, cuando el sol comienza a ponerse, empiezan a surgir colores vivos que van desde el azul más intenso, al morado difuminándose en lavanda, y desembocando en el rojo al horizonte. Tan solo se tratan de unos pocos minutos, pero que desearás que se convirtiesen en horas. Normalmente todo el mundo quiere capturar ese momento con sus móviles o cámaras fotográficas, pero a veces es tal la sensación, que olvidas por completo sacar la tecnología y lo guardas directamente en tu retina. Y esque ese hipnótico instante en el que el sol toca el mar y el paisaje explota, es único.
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