La época colonial de México es el período histórico de la nación mexicana que inicia en el siglo XVI, con el fin de las cruentas guerras de colonización que produjo la llegada de Hernán Cortés y los conquistadores españoles al territorio del entonces Imperio Mexica (Azteca), y culmina con la Guerra de Independencia
Se le conoce como el mundo prehispánico a las culturas que se desarrollaron en América antes de la llegada de los españoles, los pueblos americanos formaron culturas autónomas como los mayas, aztecas, olmecas, zapotecas, mixtecas, tarascos, incas, entre otros
La Revolución de Ayutla fue un movimiento insurgente originado en el estado de Guerrero en el año de 1854
La Constitución fue promulgada el 4 de octubre de 1824. Planteada como un pacto entre los estados, dividía la República en 19 estados y cinco territorios. Cada estado elegiría su gobierno y su congreso. El gobierno se compondría de tres poderes: ejecutivo, legislativo –senadores y diputados- y judicial
Si bien es cierto que durante el largo mandato presidencial del general Díaz, consecuencia de sus sucesivas reelecciones, México logró un importante desarrollo económico, el beneficio fue sólo para unos cuantos, en su mayoría empresarios extranjeros y familias acomodadas simpatizantes de las ideas políticas del gobierno de Díaz. La clase trabajadora, a pesar del auge económico, nunca vio una mejora en su calidad de vida, muy al contrario, fueron explotados en los trabajos que realizaban en fábricas o haciendas, y remunerados con sueldos extremadamente bajos, que no satisfacían ni siquiera las necesidades más esenciales para vivir.
El periodo comprendido entre 1857 y 1872 marca un importante parteaguas para el México independiente pues en él se gestaron las reformas legales liberales que insertaron al país en la modernidad, abriendo una brecha entre Iglesia y Estado y concluyendo con el sistema virreinal que aún pervivía décadas después de la independencia. Sin embargo, la lucha no sólo fue ideológica, se convirtió en una guerra fratricida entre liberales y conservadores mexicanos que culminó con la segunda intervención francesa y la imposición del imperio de Maximiliano de Habsburgo en México. La República fue restaurada por Benito Juárez en 1867. El Palacio Nacional fue testigo y escenario natural del cambio y la consolidación liberal