‘¡Somos lgbti’ se gritó con orgullo en las calles de Medellín

Variedad de orientaciones sexuales. Variedad de mensajes. Variedad de historias. Pero también, variedad en las versiones entregadas sobre la realidad que vive la comunidad Lgbti en Medellín.

Esto se vio ayer en la movilización por la reivindicación de los derechos de las personas de esta comunidad, una de las más significativas de Suramérica para esta población, según la alcaldía municipal.

Edal Monsalve, codirector de la Alianza Social LGBTI de Antioquia, indicó que cerca de 8.000 personas participaron en la marcha, que comenzó en el centro de la ciudad, sector Barbacoas, y terminó dos horas después en el parque de las Luces, donde se unieron 30.000 más para disfrutar de una tarima cultural.

“La novedad es que después de 3 años la marcha volvió a la Oriental con Barbacoas, como homenaje a lo que es hoy el sector de la rumba y era, en otrora, el único espacio para la visibilización de la población Lgbti”, contó Monsalve.

Para él, Medellín es una de las ciudades más tolerantes en cuanto a diversidad sexual y aunque hay avances como la creación de una política pública (Acuerdo 08 de 2011 reglamentado por el decreto 1928 de 2011), falta más trabajo para que esta se cumpla a cabalidad.

“Estamos esperando que el alcalde haga público el reconocimiento que le dieron a Medellín como ‘ciudad arcoíris’, es decir, amigable con la diversidad sexual. Pese a que aún tenemos dificultades con la homofobia, también resaltamos los avances”, agregó.

Uno de esos, es el apoyo de la comunidad heterosexual en la reivindicación de los derechos de la población Lgbti.

Algo que concuerda con lo revelado en la Encuesta de Cultura Ciudadana 2017, la cual indicó que los habitantes de la ciudad son cada vez más respetuosos con la diversidad sexual y de género.

Estamos esperando que el alcalde haga público el reconocimiento que le dieron a Medellín como ‘ciudad arcoíris’, es decir, amigable con la diversidad sexual

No solo eso. Medellín encabeza la lista de los matrimonios igualitarios efectuados en el país, con 141 casamientos en los últimos dos años acorde a cifras de la Superintendencia de Notariado y Registro. Es decir, que el 23, por ciento del total de uniones en todo el territorio colombiano (604 con corte a abril de este año) se realizaron en la capital de Antioquia.

En la marcha, más allá de los colores del arcoíris plasmados en banderas y vestimentas, también sobresalieron los mensajes. “Mi hermano es gay y lo amo”, “nuestro hijo es hetero pero igual lo amamos”, “y si lo llevas ya en tus venas ¿qué puedes cambiar?”, fueron algunas de las frases que se expusieron en la caravana.

Para Sebastián García, asistente a la marcha, más allá de la celebración y el ambiente festivo, el encuentro llevaba un mensaje de inclusión.

“Ya es hora de que la sociedad tome conciencia de que hacemos parte de un colectivo y que queremos hacernos notar, pero por nuestro talento y nuestro aporte a la sociedad”, manifestó.

Ese, y otros derechos, fueron exigidos con mayor ahínco en la marcha que tuvo como lema ‘Nos nombramos, nos reconocemos. Somos LGBTI’.

Monsalve indicó que en esta versión se hizo un homenaje a las mujeres diversas LBT (lesbianas, bisexuales y trans) pues según él, son las poblaciones menos visibilizadas y cuyos derechos son los más vulnerados.

Sin embargo, los problemas para esta población, en general, van más allá del rechazo.

Juan Fernando Gómez, personero delegado para los Derechos Humanos, denunció que otro aspecto preocupante es el acceso a la salud.

Queremos hacernos notar, pero por nuestro talento y nuestro aporte a la sociedad

Según el funcionario, la población trans tiene dificultades para acceder al sistema general de Seguridad Social.

Además, según cifras de la secretaría de Seguridad, en 2017 fueron víctimas de homicidio siete personas Lgbti.  Pero como el registro es tan deficiente, la cifra puede ser mucho mayor.

“Los datos terminan siendo parte de las estadísticas generales sin una caracterización específica”, expresó el personero delegado.

MEDELLÍN