El agility es un deporte inclusivo. No hay límites de edad, género ni ocupación. Esta actividad consiste en sortear un circuito de obstáculos sin faltas y lo más rápido posible. El único requisito es tener un amor profundo por los animales y dedicarle algo de tiempo al entrenamiento. De forma no oficial, el agility se practica en Ecuador desde hace más de seis años, cuenta Juan Carlos Ruales, director de Eventos y Exposiciones de la Asociación Ecuatoriana de Registros Caninos (Aercan). Hace un año se oficializó el deporte con estándares internacionales proporcionados por la Federación Cinológica Internacional. Participan personas de todas las edades y perros de todas las razas y tamaños. Sin embargo, son los jóvenes quienes dan vida a este deporte en el país. “Esta actividad te genera un vínculo muy importante y muy fuerte con tu perro porque aprenden a conocerse, disfrutan del ejercicio y se esfuerzan como parte del mismo equipo”, explica Juan Carlos Montalvo, entrenador en el Campamento Canino y juez de agility en el Ecuador. Washington Anangonó, de 24 años, entrena junto a Igor, un jack russel de 10 meses de edad. Luego de cuatro meses de preparación, esta dupla compite en la categoría 0, a nivel local.
En los campeonatos internacionales existen tres categorías (1, 2 y 3) según el nivel que tenga el perro. En Latinoamérica se trabaja también con la categoría cachorros, perros jóvenes y 0 (para principiantes). De esta forma se busca conformar nuevos equipos que alcancen títulos internacionales. Actualmente están registradas 42 duplas (un can y un guía) que pertenecen a seis equipos. Hoy en día, Ecuador cuenta con dos perros que compiten en la categoría dos. Dedicarse al agility no requiere mucho tiempo. Para entrenar al perro se necesitan 15 a 20 minutos diarios para evitar que se aburra. Para los niños y jóvenes es una actividad ideal para después del colegio. Además, se aprende sobre la tenencia responsable y el adiestramiento en positivo, pues los canes aprenden a sortear los obstáculos con juegos y premios.
Este contenido ha sido publicado originalmente por Diario EL COMERCIO