Relajarse es fácil con el estilo nórdico

El estilo más usado en la mayoría de las casas de todo el mundo por su sencillez, su tranquilidad y su orden

En la actualidad el estilo nórdico es uno de los más usados en las viviendas ya que un 72% en todo el mundo lo utiliza en sus casas ya que se trata de un estilo que quiere concebir espacios lo más acogedores posibles y al mismo tiempo aumentar al máximo la luz natural de los interiores ya que este estilo proviene de los países nórdicos, países que disponen de muy pocas horas de luz durante el día, eso hace que cada rayo de sol sea muy apreciado para ellos. 

En la decoración de interiores el estilo nórdico se desarrollo por primera vez en los países escandinavos en el año 1950 a causa de las difíciles condiciones climáticas que estaban expuestos como las bajas temperaturas, el hielo, la nieve y las pocas horas de luz diarias hicieron desarrollar este estilo tan sencillo pero a la vez tan acogedor.

Este estilo proviene de la palabra “Hygge” que su traducción podría ser “las cosas que nos hacen sentir bien”. Este termino tiene raíz en los países escandinavos donde en sus interiores solo quieren objetos simples, acogedores y confortables. 

Este estilo surgió por la necesidad de quedarse tanto tiempo en casa a causa de las bajas temperaturas de manera que es esencial conservar los espacios bien ordenados y visualmente simples, acogedores, confortables y relajantes a partir de seis puntos básicos para conseguir un perfecto estilo nórdico.

Espacios visualmente sencillos; se busca en los interiores calma y belleza a través de la sencillez escapando del desorden con muebles simples, lineales y de calidad que no pasen de moda. Hay que tener en cuenta que los materiales que se usan para estos interiores sean naturales.

Espacios funcionales; lo más importante es que los espacios buscan un resultado en las cosas con belleza, es decir, utilizando muebles prácticos que cumplan con su función de almacenamiento sin perder la estética de estos.

Colores blancos como primera opción; en los países nórdicos la iluminación es una de las cosas más importantes ya que disponen de muy pocas horas de luz, por lo cual, el color blanco usado en paredes y muebles ayudan a reflejar la luz y además a ampliar visualmente los espacios. No obstante es importante utilizar en menor cantidad los colores negros, grises y marrones creando así la paleta del diseño nórdico.

Lugares cálidos; los espacios del estilo nórdico se caracterizan por ser lugares cálidos y acogedores. Eso se consigue gracias a los materiales naturales, primordialmente la madera, usada en los muebles, el suelo y en menor medida en los techos. Además podemos encontrar chimeneas y complementos téxtiles.

Téxtiles para una mayor calidez; se suelen utilizar cojines, alfombras, mantas, etc. de materiales naturales como son la lana, el lino, el algodón y las pieles de oveja para aportar además de calidez un gran confort en los interiores nórdicos. 

Un toque de color en los espacios nórdicos; siguiendo con las características de los interiores escandinavos con la utilización de materiales naturales, uno de los objetivos que se plantea este estilo es poder disfrutar del exterior dentro de las casas. Eso lo consiguen a través de los marrones de los muebles de madera natural y plantas de color verde como objetos de decoración como per ejemplo los cactus, el bambú o algunas ramas de eucaliptus.

Así que si se utilizan todas estas técnicas podrás llegar a conseguir una casa con un estilo tan luminoso, tan ordenado y tan tranquilo, porque al fin y al cabo es el que necesitas cuando llegas a casa.