Al iniciar su administración, Ruiz Cortines se centró en el objetivo de proyectar una nueva imagen del poder presidencial, desprestigiado por el régimen de Miguel Alemán y por la idea generalizada de que este presidente impulsó la economía omitiendo las políticas de beneficio social. Aunque Alemán había logrado un auge en la economía mexicana, el descontento general del pueblo era evidente por la corrupción de los funcionarios públicos, quienes en el sexenio alemanista eran empresarios que se habían enriquecido enormemente. Mientras tanto, el nivel de vida de las clases trabajadoras sufrió un considerable deterioro.
En busca de una política que contrastara con el régimen de Miguel Alemán, Ruiz Cortines buscó dar solución a la problemática social y dio inicio a una nueva era de austeridad y moralización. Se modificó la ley referente a la responsabilidad de servidores públicos, que apuntaban de forma indirecta a ser corruptos, al proponer Ruiz Cortines que dichos funcionarios declararan sus bienes antes de iniciar sus labores y que se pudiera investigar el origen de la fortuna de quiénes poseyeran propiedades superiores a sus ingresos económicos.
La ley reglamentaria del artículo 28 constitucional sufrió una reforma en materia de monopolios: se sancionaría con más severidad a las personas que monopolizaran artículos de primera necesidad. Durante 1953 se efectuaron multas a comerciantes por violaciones a los precios fijados en dichos artículos, que ascendieron a la cantidad de $16,242 pesos y que reflejaron la severidad del gobierno de Ruiz Cortines. Al poco tiempo ordenó la suspensión de todos los pagos a los contratistas del gobierno para revisar el estado de cada proyecto. Reportó ante la Secretaría de Comunicaciones y Transportes la recepción de una factura respecto a una carretera de 120 kilómetros que no existía; inmediatamente ordenó que se multara al contratista con el triple de la suma que pretendía cobrar.
El gobierno ruizcortinista decidió reducir el gasto público ajustándose a los ingresos corrientes, con el propósito de lograr el saneamiento de las finanzas públicas y combatir la inflación. En ese momento, los empresarios estaban desconcertados por el nuevo estilo de gobierno, temiendo que sus posibilidades de ganancia se vieran afectadas en el momento en que la economía mexicana atravesaba por una crisis. Esto propició la incertidumbre en la industria privada y la fuga de capitales. En 1953 se redujo la inversión privada, Ruiz Cortines reorientó su política hacia el impulso de la producción.
La lucha de la mujer por obtener sus derechos de votación y de tomar decisiones comenzó en el mundo hace varios siglos. En México, las primeras manifestaciones de ello se dieron entre 1884 y 1887, cuando una revista escrita exclusivamente para mujeres, demandó el sufragio femenino. También durante la Revolución Mexicana, muchas mujeres simpatizantes del movimiento de Francisco I. Madero exigieron, sin obtener resultados, su derecho a votar.
En el año de 1937 el presidente Lázaro Cárdenas solicitó a la Cámara de Senadores la iniciativa para reformar el artículo 34 constitucional para que las mujeres obtuvieran la ciudadanía. En 1938 la reforma fue aprobada por los senadores y por la mayoría de los estados. El 24 de diciembre de 1946, la Cámara de Diputados aprobó la iniciativa propuesta por Miguel Alemán, en la que se modificaba el artículo 115 constitucional para que las mujeres participaran en las elecciones municipales en igualdad de condiciones que los hombres, con el derecho al voto y a ser elegidas. La ley entró en vigor el 12 de febrero de 1947.
En un discurso que dio como candidato el 6 de abril de 1952 en el Parque 18 de marzo de la ciudad de México, Ruiz Cortines se comprometió ante las 20 mil mujeres asistentes a que “si el voto nos favorece en los próximos comicios, nos proponemos iniciar ante las Cámaras las reformas legales necesarias para que la mujer disfrute los mismos derechos políticos del hombre”.
Ya como presidente, Ruiz Cortines envío su iniciativa el 9 de diciembre de 1952; misma que fue aprobada inmediatamente y por unanimidad por el Congreso de la Unión. El 17 de octubre de 1953, el presidente Ruiz Cortines cumplió su promesa y promulgó las reformas constitucionales que otorgaron el voto a las mujeres en las elecciones federales. Ese mismo día se publicó en el Diario Oficial de la Federación la reforma del artículo 34 constitucional:
“Son ciudadanos de la República los varones y las mujeres que, teniendo la calidad de mexicanos reúnan además los siguientes requisitos: haber cumplido 18 años de edad, siendo casados, o 21 si no lo son y tener un modo honesto de vivir.”.
Luchadoras sociales e intelectuales asistieron al recinto parlamentario para estar presentes en el momento histórico. Entre ellas estaban Elvia Carrillo Puerto, quien lucho su vida entera para alcanzar el propósito, Adelina Zendejas, Adela Formoso de Obregón Santacilia, María Lavalle Urbina y Amalia Castillo Ledón. Luego se le rindió un homenaje a Ruiz Cortines en el Palacio de Bellas Artes.
Para las elecciones federales del 3 de julio de 1955, donde se deberían de elegir diputados, senadores y siete gobernadores; las mujeres acudieron por primera vez a las urnas de votación. La primera en depositar su voto fue su esposa María de los Dolores Izaguirre. Resultaron electas diputadas Remedios Albertina Ezeta por el estado de México; Margarita García Flores por Nuevo León, Guadalupe Ursúa Flores por Jalisco y Marcelina Galindo Arce por Chiapas.
Los dirigentes del PRI colaboraron en la disolución del movimiento henriquista, lo cual sucedió en febrero de 1954. Varios estados no estaban de acuerdo con su gobierno, motivo por el cual Ruiz Cortines impuso disciplina para remover a los disidentes: el gobernador de Yucatán Tomás Marentes Miranda dimitió al cargo el 15 de junio de 1953 y el de Guerrero Alejandro Gómez Maganda hizo lo mismo el 20 de mayo de 1954. El 22 de marzo de 1955, Manuel Bartlett Bautista renunció a su cargo como gobernador de Tabasco; el 9 de agosto del mismo año, Ruiz Cortines exigió la renuncia del gobernador Óscar Soto Maynez. Otro gobernador de oposición fue el del estado de Oaxaca, el general Manuel Cabrera Carrasqueado, quien murió de un padecimiento cardiaco el 1 de octubre de 1955. Al final el sexenio, como dice Krauze, Ruiz Cortines tenía "veintiocho gobernadores fieles de veintinueve posibles."
En abril de 1952 fue creada la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos, asociación que se afilió al PRI, y que pronto entró en disputa con la CTM. En un intento por lograr la unificación de los obreros, el gobierno propició la formación del Bloque de Unidad Obrera, que por un tiempo logró aglomerar centrales y sindicatos con diferencias entre ellos.
Los generales Marcelino García Barragán, Miguel Henríquez Guzmán, Celestino Gasca y Francisco J. Múgica mantuvieron una relación distanciada con el gobierno de Ruiz Cortines pues, además de estar inconformes con su administración, tenían la idea de retomar las armas nuevamente. Con algunos militares Ruiz Cortines tomó medidas severas: disolvió la Federación de Partidos del Pueblo Mexicano, a donde los generales se encontraban afiliados; se les expulsó del PRI y se les dio de baja del Ejército Mexicano.
Durante su administración, la proporción del presupuesto destinado al ejército se redujo de 9.7 a un 8%. Otros viejos generales de la Revolución Mexicana, como Jacinto B. Treviño y Juan G. Barragán, se aliaron para formar el Partido Auténtico de la Revolución Mexicana. Ruiz Cortines les facilitó el registro, siendo él mismo quien se los concediera.
En el sexenio ruizcortinista se disminuyó considerablemente el reparto agrario ya que solo se habían concedido 3.5 millones de hectáreas entre 1952 y 1958, pues ya no había muchas tierras que el gobierno pudiera repartir.A principios de 1958, los disgustados jornaleros y campesinos del norte del país iniciaron una época de invasión a las propiedades privadas, donde sus dueños eran en realidad latifundios.
En Sinaloa, Baja California, Sonora y la Comarca Lagunera; miles de campesinos invadieron tierras particulares para revelar a los latifundios, dándose el caso donde algunos invasores eran obligados a abandonar los terrenos por la fuerza. En el estado de Sonora, el gobierno expropió el latifundio estadounidense de Cananea, que constaba de una extensión de medio millón de hectáreas. En este lugar, como en algunos otros donde el latifundismo era explícito, Ruiz Cortines mandó a expropiar las tierras por decreto emitido el 21 de agosto y procedió a su reparto de manera inmediata. La policía y el ejército reprimieron y encarcelaron a los líderes de las invasiones, resolviendo de esta manera el conflicto campesino.
Muchos de los profesores de la IX Sección del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación no estaban de acuerdo con el rumbo que había tomado su sindicato, motivo por el que organizaron una rebelión encabezada por los profesores normalistas Othón Salazar y José Encarnación Pérez Rivero. En julio de 1956, el gremio de los maestros inició una movilización en todo el país demandando un aumento salarial debido a que se negaron a recibir el pobre incremento que ofrecía el presidente del SNTE Manuel Sánchez Vite.
El SNTE se separó del sindicato controlado por la CTM y creó el Movimiento Revolucionario del Magisterio. Aprovechando que se acercaban las elecciones presidenciales, en 1958 comenzó la movilización en busca de las mejoras salariales y del reconocimiento del MRM dentro del SNTE.
Los maestros, encabezados por Othón Salazar, se posesionaron del edificio de la Secretaría de Educación Pública por unos meses. Ruiz Cortines, como consejo de su esposa, tomó la decisión de dar la orden de que persona que saliera, ya no entraba. No habían podido desalojar antes porque los maestros entraban y salían libremente.
Con la gran manifestación efectuada en el Plaza de la Constitución en abril de 1958, el gobierno envió a la policía del Distrito Federal y a los granaderos para reprimir a los disidentes y encarcelar a sus líderes. Othón Salazar fue encarcelado en la prisión de Lecumberri. Dado que la opinión pública se puso del lado de los maestros, con motivo del festejo del Día del Maestro, Ruiz Cortines concedió las mejoras sociales que exigía la IX Sección del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación el 15 de mayo de 1958.
Esta web se reserva el derecho de suprimir, por cualquier razón y sin previo aviso, cualquier contenido generado en los espacios de participación en caso de que los mensajes incluyan insultos, mensajes racistas, sexistas... Tampoco se permitirán los ataques personales ni los comentarios que insistan en boicotear la labor informativa de la web, ni todos aquellos mensajes no relacionados con la noticia que se esté comentando. De no respetarse estas mínimas normas de participación este medio se verá obligado a prescindir de este foro, lamentándolo sinceramente por todos cuantos intervienen y hacen en todo momento un uso absolutamente cívico y respetuoso de la libertad de expresión.
No hay opiniones. Sé el primero en escribir.