A partir del mes de abril el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) nacional dispuso el uso obligatorio de guantes y mascarillas para reducir el riesgo de contagio de coronavirus, sin embargo, la utilización de guantes no es recomendable según especialistas de la salud, debido a que causan sensación de falsa seguridad, mientras que no todas las mascarillas garantizan la protección total ante el virus.
Édison Tacuri, médico general, señala que “las mascarillas recomendables son las quirúrgicas, exclusivamente para el sector de la salud, mientras que, para la población en general se recomienda el uso de la mascarilla N95 u otras elaboradas en material anti fluido que sean reutilizables”.
Sin embargo, no todas las personas son conscientes de ello, incluso no tienen un conocimiento adecuado para hacer uso de estos, lo que resulta perjudicial para la salud, así lo confirma Karen González, medico dermatóloga, quien además señala que, “ante el desconcierto se debe evitar el uso de guantes ya que en ellos se puede llegar a albergar un sinnúmero de bacterias, y al usarlos, reducimos el lavado de manos, incluso recurrimos menos al uso del alcohol, que si son indispensables”.
En cuanto a la utilización de estos implementos de bioseguridad, la ciudadanía aún no se encuentra adaptada, siente incomodidad al momento de realizar sus actividades diarias, debido a que en algunos casos deben mantener lamascarilla durante toda su jornada laboral. “Al momento de respirar presento inconvenientes, además de sudoración y picazón en la nariz, pero no puedo hacer nada, ya que una de las recomendaciones es que no toque mi rostro por ninguna situación, y sobre todo porque temo contagiarme si lo hago”, así lo comenta César Cabrera, servidor público, quien debe mantenerse en su lugar de trabajo por más de 8 horas.
Pero también, se encuentran los ciudadanos comunes, tal es el caso de Isabel Suquilanda, una ama de casa que hace uso de la mascarilla únicamente para salir hacer compras, sin embargo, en el poco tiempo que la usa, menciona que “me impide respirar, y me produce sudoración incluso deseo sacarme la mascarilla para poder respirar de mejor manera”. Pese a que son pocas las horas que la utiliza no se siente completamente protegida ni cómoda, debido a que nunca estuvo acostumbrada a estas, además acota que la situación lo amerita para el bienestar de todos.
El uso de implementos de bioseguridad también ha traído consigo un problema ambiental ocasionado por el alto nivel de contaminación que estos residuos generan. Los profesionales de la salud están capacitados para la correcta eliminación de estos implementos, pero la ciudadanía no. El primer problema ambiental es el desecho de guantes y mascarillas en la vía pública, aquí las consecuencias son las mismas que con los plásticos, donde las aves y fauna urbana las ingieren.
“Que estos desechos lleguen a ríos y alcantarillados aumentan problemas secundarios en presencia de lluvia, aparte de incrementar el riesgo en salud porque genera acumulación de humedad, luego tenemos la cantidad de estos desechos, ahora en el país en las playas se sigue viendo la basura de plástico y agregamos insumos de infección como los guantes y mascarillas” indica Paulina Torres, ingeniera ambiental, quien acota que la degradación de los guantes tiene una duración de 30 años y las mascarillas de 400 años.
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