La hermana M ónica Astorga, conocida por su ayuda incansable a la comunidad trans, inició una colecta para poder acercarle alimentos a estas mujeres que en época de cuarentena, por el coronavirus, muchas no tienen para comer.
"La realidad de las trans es que la mayoría ejerce el trabajo sexual y en esta época no pueden trabajar. Ellas lo están pasando solas", expresó a LM Neuquén Astorga.
La monja entregó la semana pasada 45 bolsones de comida que reunió en la Casa de Asistencia y Acompañamiento Comunitario (CAAC) para mujeres trans en esta ciudad.
El lugar donde se puede acercar donaciones de alimentos y medicamentos está ubicado en la esquina de Sarmiento y Candelaria.
La hermana Mónica está en continúa comunicación la comunidad trans y su idea es que a ninguna le falte un plato de comida. "Hoy recibí un mensaje donde una chica me contaba que estaba anémica y que necesitaba un pedacito de carne", contó la mujer, quien explicó además que a cada solicitud trata de darle una respuesta.
"La realidad de las trans es muy dura. Son personas de muy alto riesgo, que con esta pandemia del coronavirus no pueden salir para nada", expresó.
La monja relató la difícil situación, que al igual que todas las personas que trabajan de manera informal, están padeciendo por la cuarentena del coronavirus. Ese mensaje lo compartió en sus redes y varios ya se hicieron eco para reunir alimentos para las mujeres trans.
Como la ex concejal Valeria Neculqueo, quien si bien vive en Buenos Aires, reunió fondos para enviarle a Mónica y también a varias amigas neuquinas quienes hicieron su aporte.
Mónica esta preocupada por el bienestar de la comunidad trans, y destacó que si bien no son mayores de 35 años necesitan la vacuna antigripal.
En este sentido, Luján Acuña, enfermera de la Salud Pública e integrante de la comunidad trans contó que se vacunaron a algunas mujeres quienes ya estaban inscriptas y que si bien actualmente la prioridad la tienen los mayores, en cuanto se pueda se vacunará también a ellas.
"Las mujeres trans sufren muchísima soledad, la gente esta desesperada por vivir esta cuarentena y tienen su familia, tienen su casa. Y ellas están solas. Las trans no tienen nada, lo viven en total soledad, algunas viven en cuartitos de 2 por 2, no tienen ni comida. Eso es la marginalidad de la marginalidad", destacó Astorga, quien continuará con su armado de bolsones de comida.
Por su parte, Adrian Urrutia, titular de la dirección de Diversidad de la Provincia contó que también desde ese organismo ayudan con alimentos a la comunidad trans.
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