Las enfermedades del corazón siguen siendo la causa principal de muerte en todo el mundo; lamentablemente, los pocos tratamientos disponibles no tienen mucho éxito, una vez que el tejido cardíaco ha sufrido daños. El corazón de los mamíferos es realmente capaz de regenerar y reparar el daño por sí mismo, pero se cuenta con esta facultad regenerativa, sólo hasta el momento del nacimiento, después de esto, la capacidad desaparece aparentemente para siempre.