Es difícil de explicar y complicado de entender...
Cómo es posible querer a alguien y permanecer a su lado si te está haciendo tanto daño?
Casi sin darte cuenta tu libertad fue disminuyendo...
Acordate:
Antes salías, entrabas, ibas a comprar, a ver a un amig@, etc, y no había ningún problema.
Ahora todo se complicó y parece que necesitas una 'especie de permiso' para hacer las cosas que antes hacías con normalidad habitual.
Qué pasó?
Realmente necesitas la 'aprobación' de tu pareja para hacer las cosas que querés hacer?
Y tené cuidado porque esta falta de libertad también afecta otras áreas de tu vida!
Modificaste tu forma de vestir, tus decisiones de futuro, te alejaste de amig@s o familiares?
Pequeños detalles, formas de hablar, chantajes...
Estas cosas hacen que poco a poco se vaya coartando tu libertad y al final te convertís en alguien que no sos y en un momento te das cuenta que sos alguien que no querés ser.
Analízate y pensá si cambiaste!
Un factor común en cualquier relación de pareja tóxica es 'La Manipulación'
El 'chantaje emocional' es lo mas utilizado para conseguir que una persona haga lo que otra quiere...
Se podría pensar que el manipulador está por encima de su pareja, que tiene poder sobre su pareja, sin embargo justamente el manipulador suele ser alguien con baja autoestima y con mucha inseguridad.
Tiene tanto miedo de perder a su compañer@ que utiliza todo tipo de artimañas para controlar, vigilar y conseguir que su pareja haga lo que quiere.
Gritos, malas contestaciones, críticas, palabras hirientes, malas caras, llantos, peleas… Te suena?
Si esto es lo que vivís en tu día a día planteate y pensá si ya no estás inmers@ en una relación tóxica...
Hay que tener en cuenta que no siempre es la mujer la persona que está siendo manipulada.
Son muchos los casos en los que la mujer es quien coacciona la libertad del hombre.
De modo que para que quede claro: en las relaciones tóxicas no está predeterminado el rol de la persona por el género.
Esto quiere decir que no siempre la mujer es víctima y el hombre quien coacciona, sino que depende de la personalidad de ambos.
Alivio
Uno de los síntomas más claros de que estás viviendo una relación tóxica es que cuando tu pareja no está sentís alivio.
Estás más tranquil@ y relajad@.
No tenés esa tensión de cuidarte de ver, decir o hacer algo que no le vaya a gustar.
Falta de diálogo
Es fundamental que puedas hablar con tu pareja sin ningún problema.
Debes tener la libertad de poder decir cómo te sentís, qué queres y cuáles son tus inquietudes sin que te haga sentir que te está juzgando todo el tiempo.
Desvalorar
Se cae continuamente en desvalorizar a la pareja.
Comentarios y actitudes como:
'Yo no hubiera actuado así, le hubiese dicho que...' (Porque yo soy mejor o mas inteligente)
o
'Vos nunca vas a entender lo que te estoy diciendo...' (Porque no sos lo suficientemente inteligente para entender)
son muy habituales cuando tu pareja no te está aportando nada bueno...
En lugar de hablarte con cariño y respeto, su tono de voz y palabras están llenas de superioridad y violencia verbal.
Pero claro, como todo en la vida, si no sabes que tenes un problema va a ser muy difícil que puedas intentar resolverlo...
Así que planteate si lo que te dice tu familia y amig@s es verdad.
Sería mucha coincidencia que todo el mundo piense que el tipo de relación que tenés te hace mal, no?
Por si aún no quedó en claro de que estamos hablando, éstas son algunas señales que identifican una relación tóxica
1. No podés ser vos
Al principio quizás no te das cuenta, pero a medida que avanza la relación ves que para que no haya tensión y discusiones tienes que renunciar a muchas cosas.
Tienes que andar 'midiendo lo que decís y lo que haces', y poco a poco vas renunciando a tu espontaneidad y a tu esencia.
Es muy probable que haya amig@s y otras personas a tu alrededor que te adviertan de que esa relación no te conviene.
Vos en el fondo también lo piensas, pero tus sentimientos son tan fuertes que todavía crees que lo que los une es amor...
2. Tenés que andar pisando huevos
Empezás a temerle a las reacciones emocionales de tu pareja porque sabes que son desmesuradas.
Notas que tu pareja es realmente susceptible y cualquier cosa le puede caer mal.
Y cuando algo le molesta te hace sentir mal a vos con su desprecio, su enojo o su indiferencia.
Así que de a poco vas ocultando algunas cosas y maquillas o distorsionas otras para que no le caigan mal.
Sufrís permanentemente porque no tienes claro si lo que haces le va a caer mal.
Y de este modo la preocupación constante empieza a formar parte de tu vida...
3. Te vas aislando del mundo
Tu pareja se muestra celosa y desconfiada y no le gusta que tengas otras relaciones importantes.
Se enoja cuando salís con amigos, tiene celos de algún/a compañer@ de trabajo y no te deja tener tu espacio.
Te va acaparando y terminan haciéndolo todo juntos!
Ves que poco a poco vas renunciando a tu vida social para evitarte complicaciones...
Confundís la posesividad con el amor y al principio lo valoras, pero con el tiempo notas que estás renunciando a tu vida y te duele.
4. No podes hablar de lo que realmente te importa
Te gustaría hablar con tu pareja de lo que te preocupa, de la relación, de sus planes a futuro...
Sin embargo hay temas de los que tu pareja se niega hablar.
Simplemente se enoja, se va, te ignora o te menosprecia pero no conseguís poner sobre la mesa lo que realmente te importa.
Y como no pueden hablar, no sabes realmente qué piensa o qué podés esperar de tu pareja y de tu relación.
Eso sí, con el tiempo te va quedando claro que hay una serie de temas 'tabú' de los que no podrán hablar nunca.
Y la lista se va haciendo cada vez más larga…
5. Siempre están discutiendo
Todas las parejas tienen roces y discusiones especialmente en algunas etapas de la relación como por ejemplo en los inicios de una convivencia.
Con el tiempo se van conociendo y las peleas se hacen menos habituales.
En cambio en tu relación forman parte del día a día por mucho que te esfuerces en evitarlas.
Cualquier asunto pequeño termina en una explosión, y cada vez más tenés la sensación de vivir en un campo minado.
Es posible que no te hayan gustado nunca las discusiones y no sabes cómo ahora forman parte de tu vida...
6. Tenés la energía y la ilusión al mínimo
Pasa el tiempo y el enamoramiento deja el paso al sufrimiento.
Aparece el agotamiento, la falta de energía e incluso el malestar físico.
No solo tenés que medir cada uno de tus pasos sino que además tenés que reprimir tus emociones!
A tu pareja no le gusta que llores, que te coman los nervios o que te enojes y pierdas el control.
Así que no solo te callas más de lo que querrías sino que además fingís que estás bien.
Pero el sobreesfuerzo tarde o temprano empieza a pasarte factura...
7. Siempre tenés la culpa
Sea cuál sea el motivo de la tensión, terminas con la sensación de que sos la persona responsable de que las cosas vayan mal.
Por mucho que te esfuerces, por mucho que renuncies, por mucho que intentes adaptarte, nunca es suficiente!
Vivís con la sensación de no ser suficientemente buen@.
Si ya te sentías con poco ánimo este sentimiento de culpabilidad te va hundiendo cada vez más.
8. Tenés que excusar a tu pareja ante tu entorno
Las personas que te quieren se preocupan a medida que ven las consecuencias que está teniendo la relación sobre tu persona.
Quizás vieron o escucharon cómo te critica, te insulta o te humilla.
Cada vez que te lo comentan, te descubrís dando excusas para justificar a tu pareja:
'No siempre es así', 'Es que tenía un mal día', 'Es que esta persona no le cae bien', 'Ha tenido una vida muy difícil'…
Pero va llegando un momento en el que estas excusas no te las crees ni vos...
Si en este punto te diste cuenta que estás inmers@ en una relación tóxica:
No te dejes avasallar por el pánico!!
Es totalmente normal que ahora te llenes de miedos por romper con todo...
Algunos puntos que aconsejan los profesionales y que van a ayudar para saber manejarte en la relación tóxica que estás viviendo
- Debes intentar cambiarla y si ves que es imposible, dejarla
- La soledad puede ser muy dura, pero es peor tener que seguir aguantando este tipo de vida que llevas y que te hace infeliz
- Para conseguir romper con esta situación necesitás tomar las riendas de tu vida
- Olvídate de todo y tod@s y empezá a dedicarte tiempo a vos mism@
- Lo primero que necesitas es estar bien, recuperar tu autoestima y tu equilibrio
- No te dejes limitar por emociones tóxicas
- Cuánto más seren@ estés, más fácil te resultará empezar una nueva vida y romper tu relación tóxica
Y recordá que:
- Está bien que en la pareja haya límites
- Hay que tener transparencia y comunicación pero siempre debe haber un límite
- No es necesario ni tenés que contarle todo a tu pareja
- La privacidad que tenés con tus amig@s es tu ámbito personal
- Todos tenemos el derecho de tener nuestra personalidad y nuestro territorio
- Debemos poner límites para que cada uno sepa cuál es su lugar
- No pertenecemos a la otra persona, sino que compartimos una vida con ella, lo cual es muy distinto!
- Si su nivel de celos, inseguridad y problema de autoestima es muy grande va a contaminar cualquier tipo de relación que tenga
- Es muy importante centrarse en uno mismo y saber lo que querés
- Una pareja es para disfrutarla y compartir con ella la vida
Los cambios en ocasiones son muy duros, pero muy necesarios.
Nadie sabe donde te va a llevar la vida...
Puede ser a otra persona, o puede ser que un día los dos puedan estar equilibrados y juntos de nuevo.
Lo importante es saber que si te encontrás en una situación así lo que estás viviendo NO ES CORRECTO!
Además poner tiempo de por medio te va a ayudar a tener la mente más clara, a sanar estas heridas y saber qué necesitas en tu vida...
"Amar no es hacer daño.
Amar es permitir el espacio que los demás necesitan y disfrutar de ese espacio y del nuestro.
Cuando consigas tener más seguridad en vos mism@, vas a poder ser feliz como realmente querés y merecés ser"
"Y nunca te olvides de amarte a vos mism@, de respetarte y quererte.
Recordá que tenés que ser principal protagonista de tu vida"
Fuentes: Variados portales de especialistas en Sicología en español y otros idiomas
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