La organización política de la Gran Colombia fue trazada definitivamente en el Congreso de Cúcuta (1821). En dicha reunión se designó como capital la ciudad de Bogotá mientras Caracas y Quito, servían como sede de las cortes superiores de justicia de los distritos judiciales en que se dividía la república.
Constitucionalmente el gobierno se caracterizaba por un fuerte poder ejecutivo en la persona del Presidente de la República, y vicepresidentes regionales que actuaban en nombre del Presidente en su ausencia. Ambos cargos eran asignados por un colegio electoral designado por las asambleas provinciales.
El poder legislativo residía en el Congreso Nacional, compuesto por dos cámaras: el Senado y la de Representantes. Dicho Congreso tenía sesiones una vez al año y sus miembros, con un periodo de 8 años para el Senado y de 4 para la de Representantes, eran elegidos por las tres asambleas regionales del país. Cada departamento enviaba al Congreso un total de 4 senadores. El número de diputados a enviar por las provincias estaba en proporción a su respectiva población, de tal modo que se contaba un representante por 30.000 habitantes. Para la administración departamental se contaba con los Intendentes, nombrados por el Presidente, y que a su vez designaban los Gobernadores de cada provincia. Todos estos cargos ocupaban un periodo de tres años.
En tanto, el poder ejecutivo se dividía en cuatro secciones: la de Asuntos Extranjeros, del Interior, de Finanzas y Aduana, y la de Guerra y Marina.
Esta web se reserva el derecho de suprimir, por cualquier razón y sin previo aviso, cualquier contenido generado en los espacios de participación en caso de que los mensajes incluyan insultos, mensajes racistas, sexistas... Tampoco se permitirán los ataques personales ni los comentarios que insistan en boicotear la labor informativa de la web, ni todos aquellos mensajes no relacionados con la noticia que se esté comentando. De no respetarse estas mínimas normas de participación este medio se verá obligado a prescindir de este foro, lamentándolo sinceramente por todos cuantos intervienen y hacen en todo momento un uso absolutamente cívico y respetuoso de la libertad de expresión.
No hay opiniones. Sé el primero en escribir.