Continúan las inundaciones en Salou pese a los derribos en el barrio de la Salut

La canalización del barranco de Barenys ha obligado a demoler 29 viviendas en Salou, pero los residentes aseguran que esto no ha resuelto del todo el problema de las inundaciones y critican los planes de construir nuevas edificaciones en zonas propensas a anegamientos.

A finales de septiembre, una fuerte lluvia volvió a inundar algunos inmuebles, dejando a los vecinos preocupados. Dolors Benítez, que vio su antigua casa demolida en 2021 como parte del plan contra las riadas, ahora vive en un apartamento cercano a la nueva canalización. Sin embargo, el agua sigue entrando en su propiedad durante tormentas intensas, lo que la deja en constante temor.

El proyecto de canalización, iniciado en 2022, busca encauzar el agua del barranco para evitar desbordamientos en la zona urbana. La obra, financiada por la Agencia Catalana del Agua (ACA) con un costo de 17 millones de euros, ha incluido una fase en la que se colocaron grandes conductos bajo el nuevo paseo público. Sin embargo, el tramo superior del barranco aún está pendiente de canalización, lo que limita la capacidad del sistema para manejar lluvias intensas.

Además de las quejas por la persistencia de las inundaciones, algunos vecinos se oponen a los planes de nuevas construcciones en la zona. Las autoridades locales contemplan desarrollar viviendas de protección oficial cerca de la antigua vía del tren, en una zona que frecuentemente sufre anegamientos. Aunque se argumenta que una vez finalizada la canalización estos riesgos disminuirán, muchos residentes siguen escépticos y denuncian que se están cometiendo "chapuzas" en la planificación.

La historia del barrio de la Salut sigue marcada por décadas de riadas y conflictos sobre el uso del suelo, sin que los vecinos hayan podido disfrutar de una solución definitiva.