EL PROSOL
El PROSOL es un programa departamental de transferencias directas de recursos económicos públicos, provenientes de las regalías hidrocarburíferas, a las comunidades campesinas e indígenas del departamento de Tarija.
El PROSOL es creado mediante la ley nacional N° 3741, de 14 de septiembre de 2007, mediante la cual “se autoriza a la Prefectura del Departamento de Tarija, transferir anualmente de manera directa y no reembolsable, recursos departamentales provenientes de la renta petrolera, a las comunidades campesinas e indígenas del Departamento de Tarija, para la ejecución de iniciativas productivas comunales priorizadas por las comunidades campesinas e indígenas en el marco del Programa Solidario Comunal Departamental (PROSOL)” (art. 1, Ley 3741).
Esto es posible porque el año 2007 aún no se tenía un órgano legislativo departamental con facultades para elaborar leyes departamentales, de manera que la organización campesina recurre al gobierno nacional para que emita esta ley que obliga a la entonces Prefectura del Departamento de Tarija a transferir parte de los recursos departamentales a las comunidades campesinas e indígenas.
La organización campesina recurre a esta vía legal ante la negativa de la Prefectura del Departamento de Tarija para realizar las transferencias que exigían las comunidades campesinas, con el argumento de que la “ley no permite realizar transferencias a privados”.
El origen del PROSOL está en la lucha campesina para lograr que la administración prefectural de entonces asigne una parte de los recursos económicos provenientes de la explotación de los hidrocarburos en el departamento de Tarija, para las comunidades campesinas. Por esta razón, se considera que el PROSOL es fruto de la lucha social, en la que el pueblo campesino tarijeño logra arrebatarle a las clases dominantes una parte del excedente económico que pretendían, y aún pretenden, apropiarse en forma exclusiva.
La forma en que las clases dominantes se apropian de los recursos públicos es usando los mismos para pagar sueldos y salarios a su estructura clientelar que accede a los puestos de las instituciones públicas, y que controlan las decisiones sobre cómo y a quienes se contrata para ejecutar los proyectos de inversión pública, canalizando las inversiones públicas a través de empresas que pertenecen a miembros de su grupo económico, las que comparten su ganancia con los políticos en control de las instituciones públicas, sacrificando la calidad de las obras, que por lo general suelen estar mal ejecutadas porque los recursos deben primero garantizar la ganancia de los empresarios y los políticos.
Por esa razón, la organización campesina exige la transferencia directa de los recursos a las comunidades para garantizar la calidad de las obras, lo cual ha significado arrebatarle los recursos a los políticos de turno y su clientela, que pierden el control sobre los mecanismos de la corrupción que se suelen aplicar a los fondos de inversión pública.
De esa manera el PROSOL se constituye en un programa departamental que la Gobernación del Departamento de Tarija está obligada a cumplir, porque así lo establece la ley nacional 3741, en la modalidad explícita de transferencias anuales, directas y no reembolsables, a las comunidades campesinas e indígenas, para la implementación exclusiva de iniciativas productivas comunales priorizadas por las propias comunidades campesinas e indígenas.
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