POLÍTICA Y JUVENTUD HACIA EL 2019 (Ariel Camacho V)

El problema fundamental al que nos arrastra el actual conflicto es la polarización del país donde los jóvenes caen a ser simples instrumentos de las fuerzas políticas en pugna  para que los lideres o los oportunistas del momento puedan mantenerse o tomar el poder, el discurso de todas las partes es que representan y luchan con o por la “juventud”, urge discutir entonces las posibilidades de esta juventud ante una coyuntura absolutamente política que vive el país bajo el horizonte de las elecciones generales del año 2019, tanto para opositores como oficialistas en este sentido deberemos ser conscientes de que la mayor parte de la población del país y de Tarija, son jóvenes que viven el actual proceso de transición sin memoria histórica, el problema de esta situación son movilizaciones guiadas por el “meme”, que posee trasfondos políticos, económicos y culturales muy diferentes de lo que se perciben a simple vista, una transición sin memoria histórica genera problemas para la juventud en su accionar político, primero un desconocimiento de la realidad del país, de su región y los procesos políticos, económicos y sociales que se vivieron en la historia, pero fundamentalmente de los actores políticos que empiezan a formar parte más activa de estas movilizaciones y que tienen un funesto pasado político lleno de incoherencias y corrupción, pero además dificultando el empoderamiento de las nuevas generaciones y la imposibilidad de un tan necesario recambio generacional en la política.

Los jóvenes son la “vanguardia” entre oficialistas y opositores, es así que el desplazamiento del poder hacia las nuevas generaciones debe partir fundamentalmente de la elaboración de nuevas agendas políticas que partan de estas y puedan dar voz a los que hoy no las tienen, fundamentalmente jóvenes trabajadores explotados sistemáticamente por la informalidad y el desconocimiento de sus derechos, estas agendas políticas deben dar coherencia a la necesidad de cambio o profundización del proceso político actual, que deberá ser satisfecho con la toma del poder para la transformación y aplicación de estas agendas. El momento político actual es propicio para esto, pues los campos en los que se pugnan las batallas mas duras son virtuales  donde la vieja política no posee las destrezas necesarias para ser efectivos en este espacio y donde la pugna le corresponde a las nuevas generaciones, pero además de ser una vía por donde se puede construir estos nuevos liderazgos y generar comunidades.

Deberemos dejar de ser los peones del tablero de ajedrez políticola consigna debe ser No a la manipulación, Si a la renovación.