Foto: Diario 16
Hoy, la derecha en España está más dividida que nunca. Por un lado tenemos al tradicional Partido Popular (PP) que fue quien representaba en tiempos al conjunto de toda la derecha española. Pero en las pasadas elecciones generales, Ciudadanos saltó a la palestra con 32 escaños en el Congreso. Si bien no fue un duro golpe para el PP, si fue una buena mordida de votos. Ahora nos encaminamos hacia unas nuevas elecciones generales en las que todo apunta a que un tercer partido político luchara por parte de los votos de la derecha, Vox. Y es que las cosas han cambiado mucho desde que tras la refundación de Alianza Popular en lo que hoy es el Partido Popular, con José María Aznar a la cabeza, consiguieran reunificar todo el voto de derechas en un solo partido.
Sí, Aznar consiguió aglutinar a conservadores, liberales, melancólicos del franquismo, falangistas, demócrata-cristianos y el comúnmente conocido como voto de centro. A nivel estratégico fue una obra maestra puesto que no tiene mucho en común el pensamiento de un melancólico del franquismo, con el de un liberal. Pero al PP de Aznar le funcionó durante muchos años, convirtiendo su partido incluso en una potencia a nivel europeo.
Pero todo tiene un fin en este mundo y el fin de la hegemonía del PP empezó entre 2003 y 2004, tras formar parte de los países que apoyaban la invasión de Irak por parte de EEUU. Aznar, a sabiendas de que no ganaría las elecciones de marzo de 2004, nombró sucesor a Rajoy, al que le costó tres legislaturas alcanzar el poder y cuando lo hizo, estaba muy cuestionado tanto por Aznar, como de sus seguidores. Para gran parte de la derecha, Rajoy no tenía ni el carisma ni la capacidad de liderazgo que su antecesor. Por otra parte, de un tiempo a esta parte se han venido descubriendo múltiples casos de corrupción que han conseguido enfadar incluso a sus propios votantes. Corrupción que en muchos casos datan de la época de Aznar, pero que le tocó lidiar a Rajoy con ellos. Otros casos venían directamente de la era Rajoy.
Todo esto fue debilitando al PP poco a poco. La izquierda parecía reagruparse en torno a un nuevo partido, muy crítico con la corrupción del PP y parte de la derecha buscaba desesperadamente un nuevo partido de ideología similar al PP, pero sin casos de corrupción. Aparentemente lo encontraron en Ciudadanos, un partido que había nacido en Cataluña en 2006 pero que dio el paso a nivel nacional con bastante respaldo popular en las pasadas elecciones generales.
Al ya debilitado Partido Popular, le surgió otro contendiente para disputarse los votos, el anteriormente mencionado, Vox. Y es que la derecha más reaccionaria no estaba conforme con cómo Rajoy había llevado a cabo el tema independentista catalán. Muchos abogaban por una mayor contundencia para acabar con el independentismo y Vox se postuló como el único capaz de hacerlo.
De esta manera y a menos de dos meses de las elecciones generales, Vox parece que sorprenderá con sus resultados a nivel nacional. Ya resultó una sorpresa en las pasadas elecciones andaluzas, obteniendo 14 diputados en el Parlamento Andaluz. Y muchos apuntan a que la mordida de votos que va a conseguir está causando mucha preocupación dentro del PP de Pablo Casado (actual presidente del PP)
De esa preocupación nace el aparente giro a la derecha del PP, para intentar paliar la contundencia de Vox. Algo que ya parece imposible puesto que su líder, Santiago Abascal, goza de gran popularidad en todos los sectores estratégicos, incluida parte de la clase trabajadora. Si bien es cierto que el discurso de Vox se acerca más a las clases medias y a los autónomos.
¿Pero por qué Vox convence tanto? En primer lugar, es el único partido que habla claro y sin rodeos. Ha criticado la inmigración haciendo especial hincapié en la musulmana. Por otro lado supone un giro a la ya implantada en todos los partidos, corrección política. Una corrección política que ha terminado por cansar a una gran parte de la sociedad. En resumidas cuentas, viene a ser el Donald Trump español.
Y eso parece que gusta, al menos a ciertos sectores. La izquierda que también atraviesa una gran crisis, está muy preocupada por el ascenso de este partido y teme que el conjunto de la sociedad esté virando a la derecha. Y es que muchas encuestas dan al PSOE como partido más votado pero sin embargo una coalición de los tres partidos de derecha, serían quienes gobernasen. El cómputo general de votos apunta a que habría mayoría de derechas sin posibilidad de ningún pacto de la izquierda, ni siquiera apoyados por los partidos nacionalistas.
Veremos a ver qué pasa finalmente en las elecciones de abril.
4 de Marzo de 2019.
Año I. Día 19. Artículo 73.
Esta web se reserva el derecho de suprimir, por cualquier razón y sin previo aviso, cualquier contenido generado en los espacios de participación en caso de que los mensajes incluyan insultos, mensajes racistas, sexistas... Tampoco se permitirán los ataques personales ni los comentarios que insistan en boicotear la labor informativa de la web, ni todos aquellos mensajes no relacionados con la noticia que se esté comentando. De no respetarse estas mínimas normas de participación este medio se verá obligado a prescindir de este foro, lamentándolo sinceramente por todos cuantos intervienen y hacen en todo momento un uso absolutamente cívico y respetuoso de la libertad de expresión.
No hay opiniones. Sé el primero en escribir.