El amor por la naturaleza, comienza desde la persona.
La convivencia con las personas que rodean nuestro entorno; social, emocional, sentimental e interactivo, tienen su origen en un solo lugar llamado la madre naturaleza, el tiempo influye sobre la salud de un modo directo. Las bajas presiones provocan una sensación depresiva, mientras que altas presiones procuran una agradable sensación de ligereza. Los habitantes de las grandes concentraciones urbanas, a causa del permanente ruido de fondo que existe en ellas, se han acostumbrado vivir en en un constante estado de excitación nerviosa, pero, en cambio, curiosamente no son consientes de ello, pues cuando están rodeados del silencio campestre no se siente a gusto, notando a faltar algo que son capaces de descubrir.