La policía argentina recibió órdenes de impedir la salida del país a los ultras más problemáticos que quieran asistir a la Copa América

      La 46ª edición de la Copa América ha sido acogida por quinta vez en Brasil, un país en el que la violencia aumenta, de hecho, en 2018 Brasil rompió récords en su tasa de homicidios superando los 65.000 asesinatos. Esta es una de las razones por las que el gobierno argentino ve necesario impedir que los ultras más violentos y problemáticos acompañen a su selección en la Copa América.

      Las autoridades argentinas destacaron por su incapacidad de contener a los ultras que realizaron una serie de disturbios en los últimos superclásicos que disputaron en Argentina el Boca Juniors y el River Plate. Hizo falta que la final de la Copa Libertadores se jugara el 9 de diciembre de 2018 en el Estadio Santiago Bernabéu de Madrid, con un enorme dispositivo policial para impedir los disturbios.

      Al tomarse la medida de que la final de la Copa Libertadores se jugara en España y no en Buenos Aires a causa de los disturbios, la efectividad de las autoridades argentinas quedó en entredicho de cara a las fuerzas y cuerpos de seguridad del resto del mundo, razón por la que Argentina quiere limpiar el nombre de su policía impidiendo la salida a los barras bravas más violentos.

      La orden fue emitida por el Ministerio de Seguridad. La policía argentina ya ha impedido la salida hacia Brasil de siete ultras en el aeropuerto de Ezeiza. Sobre estas siete personas pesaba una prohibición de concurrencia a los estadios. Se sabe que pertenecían a los barras bravas del Club Atlético River Plate y del equipo de Primera C en cuarta categoría, Deportivo Merlo.

      Esta prohibición se hace dentro del marco de un acuerdo de cooperación entre Brasil y Argentina, firmado por la ministra de seguridad argentina Patricia Bullrich, su homólogo brasileño Sérgio Moro y el presidente de la Confederación Sudamericana de Fútbol (CONMEBOL), Alejandro Rodríguez.

      Algunos de los barras bravas trataron de sortear la prohibición contratando vuelos particulares, mientras que otros optaron por los vuelos comerciales en aerolíneas que no fueran argentinas. Aún así, los agentes de Migraciones los localizaron e impidieron que llegaran a subirse a los aviones.

      El viernes 14 de junio de 2019, dos ultras del Club Almirante Brown lograron burlar las medidas de seguridad argentinas y embarcarse a un vuelo que aterrizó en Rio de Janeiro, pero fueron identificados por la policía brasileña en el aeropuerto de Carlos Jobim, deportándolos inmediatamente.

18 de Junio de 2019, martes.
Año I. Día 121. Artículo 180.